El chef más famoso del mundo bajó 27 kilos para poder salvar su matrimonio
Esta vez, ni los olores, los sabores o los platillos más espectaculares hicieron que Gordon Ramsay se saliera del buen camino y, después de varios meses, logró bajar 27 kilos. Más que por salud, el famoso chef decidió perder peso para… ¡salvar su matrimonio!
Según reveló al diario The Times, llegó a pesar 113 kilos, por lo que su esposa, Tana Ramsey, no estaba “impresionada” con la forma en que se veía, así es que decidió tomar cartas en el asunto.
“Estaba pasado de peso … Me veía como un saco de m… Veo fotos (de esa época) y pienso, ‘¿Cómo es que Tana se quedó conmigo?’, porque Tana estaba mejor y se veía más guapa. Y ahí estaba ella, metiéndose en la cama con un maldito gordo”.
De hecho, el aclamado chef confesó que su esposa le advirtió que, o se cuidaba o corría el riesgo de perderla.
Aunado a la presión marital, Gordon no vivía el mejor contexto: nunca se alimentaba bien y, debido a las largas jornadas de trabajo, se la pasaba comiendo snack tras snack.
La gota que derramó el vaso fueron unas vacaciones en la playa, que compartió con dos guapos, David y Victoria Beckham, lo que hizo que cobrara conciencia del estado en el que se encontraba.
“Fue doloroso. Solía mirarme al espejo y pensar: ‘Maldita sea’. Fue una gran llamada de atención”.
Gordon, de 51 años, contó a la publicación que su padre murió a los 53 años, así es que le aterraba la idea de dejar solos a sus cuatro hijos: Megan (de 19 años), Holly y Jack (de 18) y Tilly (de 16).
¿Cómo bajó de peso?, le preguntaron en The Times, a lo que el conductor de programas como Kitchen Nightmares reveló que llevó un régimen militar, pues entrenó y se alimentó bajo las órdenes de un ex capitán del ejército.
Gracias a tanto esfuerzo, ahora el británico pesa 82 kilos y ha adoptado un estilo de vida saludable, que comparte con su esposa. Incluso, ambos participan en competencias Ironman, en las que nadan, corren y andan en bicicleta.
“No quiero que mi industria me mate. Sé lo poco sanos que son los chefs que están en los niveles más altos. Estrés, Suicidio. Existe un gran inconveniente en cocinar para vivir, es letal: entre la obesidad, a los infartos o la adicción a la cocaína”.
Ahora que el estilo de vida saludable se ha apoderado del chef, se ejercita tres veces a la semana con un entrenador personal. Además, ya no se obsesiona tanto con estar todo el tiempo presente en sus cocinas; en lugar de eso, dijo a The Times, viaja por el mundo supervisando sus restaurantes.