Rose McGowan, víctima de Weinstein, toma radical medida para vencerlo en juicio
Tal y como adelantaba hace unas semanas en la presentación de su serie documental 'Citizen Rose', la actriz Rose McGowan ha puesto finalmente a la venta su mansión de Los Ángeles por un precio de 1,9 millones de dólares.
La antigua protagonista de la serie 'Embrujadas' se ha visto obligada a tomar esta decisión para costear su batalla legal contra el productor caído en desgracia Harvey Weinstein, a quien acusa de haberla violado en el Festival de Sundance de 1997 y de haber comprado posteriormente su silencio con un acuerdo extrajudicial.
Casi dos décadas después, la cineasta y guionista se ha convertido en una de las principales voces del gremio de actrices y otras mujeres de la industria del cine que han sido víctimas de la discriminación y de los abusos de poder, aunque en su caso ha preferido distanciarse de movimientos como 'Me Too' o Time's Up - una plataforma que ofrece apoyo y asesoramiento legal- para centrarse en su lucha en solitario contra "esos violadores y acosadores internacionales" que se escudan en sus posiciones de poder para cometer con impunidad esos delitos.
Sin embargo, esa cruzada ha afectado a la situación económica de la intérprete, especialmente después de que se presentaran cargos contra ella tras detectarse la presencia de narcóticos en el equipaje de un vuelo que la artista había tomado el pasado mes de enero de Los Ángeles a Washington. Rose se entregó voluntariamente a las autoridades, no sin antes denunciar a través de las redes sociales que estaba siendo víctima de un complot urdido desde las altas esferas para silenciarla, y acabó pagando una fianza de 5,000 dólares para ser puesta en libertad.
Por el momento se desconoce cuándo tendrá que personarse ante el juez para aclarar tan espinoso asunto, pero ese episodio ha abierto un nuevo frente legal -con sus consiguientes gastos- para la artista, de ahí que ahora haya optado por desprenderse de su mansión de cuatro habitaciones.