Cristiano Ronaldo rinde homenaje a Santi, víctima del Colegio Rébsamen
Este fin de semana Cristiano Ronaldo realizó un gesto de solidaridad con la familia de Santi, uno de los pequeños que lamentablemente perdiera la vida en el derrumbe del Colegio Rébsamen , a causa del temblor del 19 de septiembre en la Ciudad de México.Y es que Santiago Flores Mora, de acuerdo con su mamá, era su fan número uno; incluso se hacía llamar: "Santiago Flores Mora Cristiano Ronaldo", por lo que recientemente le dirigió una carta en la que lo enteraba de que su pequeñito, que estaba a punto de cumplir 7 años de edad, quería ser como él cuando fuera grande y lo admiraba por sobre todas las cosas.
En este momento de dolor, envío a la familia de Santiago y a todas las familias que han perdido sus seres queridos un enorme abrazo. pic.twitter.com/odD28aFPfv
— Cristiano Ronaldo (@Cristiano) September 24, 2017
Las conmovedoras palabras de la mamá de Santi circularon de tal forma en redes sociales que llegaron a los ojos del futbolista, quien primero contactó a la familia a través de su representante y ahora ha publicado a través de Twitter, una fotografía en la que presume una playera del Real Madrid, con su autógrafo y dirigida para Santi; el mejor regalo que el pequeño hubiera podido recibir. Y es que entre los detalles que contó su mamá en la carta , estaba que Santi siempre quiso tener su uniforme de fútbol estampado con el nombre y el número de Cristiano. Asimismo, dedicó un emotivo mensaje de condolencias para los papás del pequeñito, así como para todos aquellos que perdieron a sus seres queridos en el sismo.
Oigan @Fun_Realmadrid ayúdennos a que esto le llegue a @Cristiano 🙏🏽🙏🏽🙏🏽 chamacos RT masivo!! pic.twitter.com/c1srhkYIHB
— Patty López de la C (@pattylopezdelac) September 23, 2017
Una fuente confidencial reveló al portal de deportes ‘Medio Tiempo’, que este domingo se llevó a cabo una misa privada en la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen y San José en la colonia Prados Coapa para los pequeñitos que fallecieron en el colegio y en presencia de sus padres, que pasan por uno de los momentos más amargos tras el temblor.