Por esta razón la actriz de "Precious" no soporta que la feliciten por adelgazar
El año pasado, la actriz Gabourey Sidibe se sometía a una operación de reducción de estómago con la intención de que eso la ayudara a adelgazar. El evidente cambio físico que se puede apreciar meses después ha ido acompañado irremediablemente de los halagos que le han dedicado tanto conocidos como seguidores, un gesto que sin embargo la estadounidense ha criticado al considerar que nadie tiene derecho a opinar sobre su aspecto aunque sea de forma positiva.
"No tienes que felicitarme por ello, del mismo modo que no me felicitas cada vez que me sueno la nariz. Es lo que tenía que hacer. Este es mi cuerpo. Tú preocúpate del tuyo", manifestó contundente este miércoles en el programa matutino 'Good Morning America' de la cadena ABC News, antes de añadir que los comentarios que más detesta son aquellos que recibe de personas a las que ni siquiera conoce personalmente.
Aunque entiende que quienes la elogian lo hacen con buena intención y respeto, al mismo tiempo la aclamada intérprete tacha esas palabras de "misóginas". Es más, según ella -que decidió perder unos kilos solo por razones de salud-, no le habrían hecho llegar tantas alabanzas si en vez de ser una mujer hubiera sido un hombre, quienes a su parecer no están sometidos a los mismos cánones estrictos de belleza que ellas.
"Le decimos a las mujeres cómo tiene o no tiene que ser su cuerpo. Hay muchísimos hombres gordos, o lo que sea, y a nadie se le ha ocurrido escribir un artículo sobre por qué tendrían que perder peso. Nadie les ha acusado nunca de promover una dieta insana a su paso por un programa para promocionar su película", aseguró en la misma conversación.
La razón principal por la que la protagonista de 'Precious' decidió pasar por el quirófano para ser intervenida de una cirugía bariátrica fue el miedo que le causaba pensar en las posibles consecuencias que podría tener para su cuerpo el padecer de diabetes tipo 2, de la cual una de las causas principales es precisamente la obesidad.
"No quería tener que preocuparme. Realmente no quería tener que preocuparme por los efectos que tiene la diabetes. Me pasaba el día preocupándome de que pudiera llegar a perder uno de mis dedos del pie", explicaba en marzo a la revista People con motivo de la publicación de su autobiografía 'This Is My Face: Try Not to Stare'.