Andrea Legarreta y Erik Rubín hablan, por 1ra vez, de sus problemas maritales

Andrea Legarreta y Erik Rubín son uno de los matrimonios más duraderos y estables del showbiz nacional y, generalmente, buscan mantener en privado su vida personal y familiar, por ello han generado interés las confesiones que hizo el músico a la periodista Mónica Garza para el programa Historias Engarzadas.

En la última emisión del programa, el cantante reveló detalles de su infancia, de sus inicios en la música, de sus años de éxito en Timbiriche, de sus momentos difíciles y, también, de su matrimonio con Andrea.

El cantante narró que después de varios años de vivir arrebatado por la fama, encontró en la conductora de “Hoy” a la mujer que buscaba para centrarse y formar su propia familia y, emocionado, narró reveló cómo se conocieron, cuando se dio el click entre ellos y el momento en el que decidieron casarse a pocos meses de haber iniciado una relación: “Siempre mi ilusión había sido formar una familia, y pues llega esta persona que tiene todo lo que yo había buscado. La vi, siempre se me hizo atractiva, inteligente. Al poco tiempo surgió esta necesidad de decirle que se casara conmigo, a los 4 meses de novios”.

Sobre las críticas que por muchos años ha recibido por el hecho de que ella sea supuestamente la mayor de fuente de ingresos en su casa, el músico dejó en claro: “Hay gente a la que no le gusta verte feliz (…) Han habido muchos chismes, la mayoría de la gente habla sin saber. Sin embargo, creo que nosotros seguimos queriendo lo mismo, ha habido una buena comunicación entre nosotros, amor, respeto, por eso seguimos juntos (…) Seguramente hay mucha gente que piensa que cuando no estoy de gira o no estoy en la tele me estoy rascando la cabeza… Yo la verdad estoy tranquilo con eso, sé quién soy, no necesito justificar, mis hijas saben. En algún momento sí me afectaron los comentarios malintencionados de la gente y sin fundamento”.

Erik reveló que una de las situaciones más difíciles de manejar como pareja ha sido difícil el encontrar espacios tras la llegada de sus hijas: “Surgen muchas cosas como los hijos, son una bendición y ahora la prioridad se vuelca hacia ellos, y entonces la vida de pareja ¿dónde queda? Realmente ese ha sido entre nosotros ha sido las cosas más difíciles de manejar, tienen entonces que encontrar esos momentos y darte esos espacios”.

Erik habló también de cómo ha disfrutado su paternidad de Mía y Nina: “Es increíble. Es algo que anhelábamos de corazón”, dijo.
“Es muy buen papá, es como otro niño, juega y se divierte, de pronto yo tengo que controlar esa parte. Siempre se involucró cambiando pañales, poniéndoles música increíble, las niñas crecieron con muy buen gusto y oído musical”, añadió Andrea.

Sobre cómo han enfrentado los rumores que tienen el fin de atacar su matrimonio o su familia, Andrea, Erik y sus hijas detallaron que no permiten que los rumores o las mentiras tengan influencia en ellos: “Lo que quieren los niños son unos papás presentes, no quieren un papá famoso, no quieren un papá exitosos, quienes unos papás amorosos y presentes”, detalló Erik.

Al ser cuestionado sobre si alguna vez han estado cerca de divorciarse, Erik respondió contundente: “No, a punto de divorciarnos no, hemos tenido momentos difíciles. Nunca nos hemos puesto como la pareja perfecta, no lo somos. Somos humanos, tenemos dificultades y problemas, pero, afortunadamente, ahorita estamos en un buen momento. Andrea es lo que siempre busqué, me da equilibrio, me hace feliz y me ha regalado lo que siempre soñé. Una persona que admiro y siempre ha estado allí en todo momento”.

Al respecto, Andrea confesó: “Sí hemos llegado a sentarnos y a platicar si debemos continuar o no, a veces la costumbre hace que te olvides de tu pareja, vives con tu familia, como socios, como amigos, convives en el día a día, pero a veces te olvidas de la pareja, entonces tienes que buscar cómo retomar. Para mí ha sido el amor de mi vida, mi socio, mi cómplice, el mejor papá que le pudo tocar a mis hijas”, dijo.

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