¿Por qué para Dan Stevens significó tanto dar vida a la Bestia?
Este es el regreso que las fans del personaje de Matthew Crawley (de Downton Abbey) esperaban. Hace unos años Dan Stevens, el actor que lo interpretó, le rompió el corazón a sus fieles seguidores cuando abandonó la exitosa serie inglesa en su tercera temporada, dejando a lady Mary (Michelle Dockery) viuda. Hoy, a sus 34 años, Dan atraviesa un momento emocionante en su carrera, ser protagonista de uno de los filmes más esperados del año, Beauty and the Beast. “Cuando supe que sería la Bestia, todos en casa nos emocionamos muchísimo: mi esposa, mis hijos y yo”, nos contó.
¿Qué fue lo más especial de unirte a este proyecto de Disney?
Poder compartir esto con mis hijos fue algo mágico. Cuando hice Night at the Museum 3, la vi por primera vez con ellos (Willow, de 7 años, y Aubrey, de 5), y al ver sus caritas en el cine supe que quería seguir haciendo proyectos para ellos.
¿Ellos tuvieron oportunidad de visitarte en el set?
¡Sí! Vinieron a la grabación del primer baile de Belle y la Bestia. Al principio estaban muy confundidos porque yo estaba en zancos, todo vestido de gris; mi hija dijo que parecía hipopótamo [risas]… pero los niños tienen mucha más imaginación, así que después entendieron.
¿Cómo reaccionó tu hija cuando conoció a Emma Watson?
La conoció antes cuando vino a cenar a la casa. Parecían amigas de toda la vida y Willow tuvo mucho que decir sobre los vestidos de Belle.
¿Cuál fue el mayor reto para ti al hacer esta película?
Fue un trabajo sumamente intenso. Además de bailar y cantar, tuve que grabar mis escenas dos veces para poder captar lo facial y lo corporal.
¿Aprendiste algo nuevo de ti en este proceso?
¡De hecho sí! Me di cuenta de que disfruto mucho bailar... más de lo que me gustaría admitir [risas]. Me unió mucho con Emma porque los dos estábamos igual de nerviosos.
¿Qué esperas que se lleve la gente de esta nueva versión?
La original me parece maravillosa, con un humor muy especial. Fuimos muy cuidadosos en mantener esos momentos divertidos. Espero que esta también se vuelva un clásico que impacte a nuevas generaciones como marcó a la mía.