Ana Brenda confiesa cuál es la única dificultad en su relación con Iván Sánchez

Ana Brenda Contreras protagoniza su primera comedia romántica, El que busca, encuentra, y en ella da vida a Esperanza, una joven que está en búsqueda de su “media naranja”, un concepto en el que la actriz mexicana no cree.

“Es una parte muy interesante de la película porque desde chiquita te dicen que busques a tu media naranja, pero yo, por ejemplo, no creo en las medias naranjas, creo que las personas debemos ser naranjas completas. La manera en la que te complementas con alguien más no debe ser para llenar carencias. Cuando te juntas con alguien debe ser para compartir la vida y no para dejar de sentirte incompleta”, dice Ana Brenda, quien tiene una relación con el actor y modelo español, Iván Sánchez.

La película, también protagonizada por Claudio Lafarga, es la historia de amor de Esperanza y Marcos. Ellos se conocen cuando eran niños tras perderse en el Estadio Azteca en un clásico Pumas vs. América y se reencuentran dos décadas después. Sin embargo, Esperanza está comprometida con Jorge, interpretado por Erik Hayser.

La actriz dice entender la presión social que siente su personaje por casarse. “Sí te puedo decir, como mujer mexicana, que la presión se siente siempre… sobre todo cuando llegas a una edad. Yo toda mi vida he luchado con eso porque al final de cuentas me han dado dos códigos totalmente diferentes”, confiesa.

“Tuve una especie de choque cultural porque mis padres son muy diferentes. Por un lado tenía a mi madre que es súper estructurada, arraigada y su familia es como muy conservadora: nunca nadie se ha divorciado y si andas de novio algunos años, te deben dar un anillo; por otro lado, mi padre ha sido como muy romántico, liberal y bohemio. Lo que él me ha dicho toda la vida es ‘no te cases, viaja’. Creo que él se siente orgulloso de mis retos y mis objetivos logrados como profesional y mujer antes que ser madre o casarse, que eso también es válido”.

Sin embargo, esa filosofía de vida de su padre que tanto la ha influido, no significa que no la ilusione la idea del matrimonio y la familia. “Es verdad que mi padre me influyó mucho, pero la vida también te va enseñando y, como dicen por ahí, uno no puede negar su naturaleza. Mi naturaleza es independiente y yo quiero conocer el mundo y lograr muchas cosas, pero eso no significa que no tenga mi corazoncito. También creo en la otra parte (el matrimonio y la familia) y la respeto mucho, por eso admiro mucho a las amigas de mi edad que están casadas y tienen hijos, porque esa chamba yo sí que no me la aviento todavía”, explica.

En cuando a su relación con Iván Sánchez, señala que un elemento que puede llegar a ser complicado por sus carreras es el ritmo de trabajo y no tanto la fama.
“Cuando estás con la persona correcta, llueva, truene, relampaguee o ambos sean famosos, pues no pasa nada. Lo que sí es difícil es la cuestión de los tiempos o de las ambiciones que tienes profesionalmente porque a veces dices, quiero estar con mi pareja, pero me llegó este proyecto que no puedo dejar ir”.

A Ana Brenda justamente le pasó eso cuando le ofrecieron el protagónico de la obra El Hombre de la Mancha, pues venía de un duro ritmo de trabajo tras grabar las series Lo Imperdonable y Blue Demon. "Me llegó la opción de hacer esto… No lo tuve que consultar porque la verdad es que yo no consulto muchas cosas de mi vida con nadie, pero sí claro que lo hablas en el sentido de qué onda, cómo le hacemos para que esto funcione. Al final se trata de estar con la persona correcta y creo que en nuestro ámbito esto puede ser lo complicado”.