Rihanna y su inseparable ánfora: el momento del Grammy del que todos hablan
Rihanna disfrutó a lo grande de la ceremonia número 59 de los Premios Grammy a pesar de que no obtuvo ningún galardón de las siete categorías en las que estaba nominada.
La cantante acudió al evento con un vestido de dos piezas de Armani Privé, que consistió en una voluminosa falda negra y un top naranja diminuto que dejaba al descubierto el tatuaje bajo su pecho. Además de llevar un clutch negro, otro accesorio que no pasó desapercibido fue la glamurosa ánfora para alcohol que llevaba, misma que estaba decorada incrustaciones brillosas.
Mientras transcurría la ceremonia, la cantante de Barbados no perdió el tiempo, pues estuvo bailando y sacando su ánfora para darle algunos sorbos, lo mismo que su vecina de lugar.
“Creo que es hora de otro trago”, se ve decirle a su acompañante antes de acercarse su poco discreto accesorio y disfrutar del brindis, para dejar una imagen que ya se ha hecho viral en redes sociales.