"Nunca volvería a hacer telenovelas", Chema Yazpik

Tu primer papel fue en la telenovela de Epigmenio Ibarra "La vida en el espejo", ¿cómo elegiste ese reto tan arriesgado como tu primer trabajo como actor y cómo abordaste este personaje?

El personaje de "La vida en el espejo" lo elegí porque era un reto; pensé, “este personaje o me quema empezando o puede resultar en algo muy bueno”. Afortunadamente resultó en algo muy positivo para mi carrera. Cuando comencé en "La vida en el espejo", la industria de las telenovelas estaba siendo sacudida por la innovación de la empresa en la que se llevaron a cabo y eso también me llevó a tomar ese riesgo. ¿Volverías a hacer telenovelas o televisión en general? Nunca volvería a hacer telenovelas. Son muchos meses haciendo personajes que en muchas ocasiones no tienen la consistencia necesaria para volverse un reto. Series de televisión si, hay proyectos muy interesantes que se están desarrollando en los que con gusto participaría. ¿Cómo te preparas para darle vida a un personaje? Siempre empiezo haciéndome preguntas sobre el personaje; después de responderlas y que el personaje tiene una serie de características, entonces busco a alguien que yo conozca que se le asemeje, que esté alrededor mío, a veces han sido miembros del equipo de filmación, algún director. Por ejemplo, para preparar el personaje de"La vida en el espejo", interrogué a todos mis amigos gays para ver cómo había sido el proceso de cada uno, sus ansiedades, si habían experimentado rechazo, etc. Fue algo muy cercano, divertido pero intenso. ¿Cómo eliges tus proyectos? Hoy en día mi finalidad es pasarla bien mientras participo en una historia; antes era para probarme a mi mismo y posicionarme, y elegía personajes más rudos e intensos. Ahora lo que busco con mi trabajo es divertirme. Creo que si pudiera, preferiría hacer comedia de aquí hasta el final. Para elegir un proyecto en general tomo en cuenta muchos aspectos: el personaje, el guión, el elenco, el director y hasta las locaciones. Al final es que hago una o dos películas cada año o dos, trato de seleccionar mis proyectos de acuerdo a todo lo que me interesa, no me gusta “maquilar” películas, las buenas cosas se hacen paso a paso y en ediciones limitadas, como un buen reloj. ¿Cuál ha sido uno de los proyectos en los que has participado en donde más te has divertido? Uno de los trabajos mas divertidos ha sido Los Amantes Pasajeros con Almodóvar, con él y con todos los actores y equipo del film. Tuvimos que cortar muchas veces porque no nos aguantábamos la risa. Fue maravilloso haber trabajado con todos y ahora seguimos siendo amigos. ¿Cómo llegó a ti ese proyecto? Almodóvar me conoció por una película que había hecho unos 4 años antes de Los Amantes Pasajeros, ésta no fue un gran éxito en taquilla, pero Pedro la vio y cuando estaba construyendo el elenco de la película me mando llamar y a después de unas semanas ahí estaba yo trabajando al lado de Cecilia Roth, Lola Dueñas, Raúl Arévalo y Javier Cámara. Un gran placer hacer ese proyecto. Al final nunca sabes que alcances o como puede beneficiarte un proyecto que hayas hecho, sino hasta que ya lo hizo. Naciste en la Ciudad de México, pero cuando alguien te pregunta dices que eres de Tijuana ¿qué te hace tener esa identidad y qué hace que Tijuana sea distinta del resto del país? Home is where the heart is. Yo soy de Tijuana, viví en Playas de Tijuana en mi adolescencia. Era una delicia vivir en donde hay playa, estar con toda la gente tan amigable y poder ir a la escuela en San Diego, vivir esta dualidad que para nosotros es tan normal en la frontera y que para los que no son de ahí es tan extraña. La ciudad te da a manos llenas desde que llegas y termina uno naturalizado tijuanense. Es un lugar que es México, pero que también es muy lejano de México; Tijuana es otro mundo, otro país; existe por si misma. Yo me voy a retirar en esa ciudad. ¿Qué opinas del cine que se está haciendo actualmente en México? Creo que el cine que se hace hoy en México es bueno. Me gustaría que las comedias ofrecieran un poco más de calidad y de complejidad, que se ampliara el espectro de personajes que se muestran en el cine mexicano para que sean más interesantes para nosotros los actores.

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Presentas Mr. Pig en Sundance con Diego Luna, su director y escritor ¿cómo fue que decidieron trabajar juntos y de qué trata el papel que interpretas? Diego y yo siempre estamos viendo qué hacemos juntos. Un día me dijo que estaba preparando un proyecto con Augusto Mendoza, el mismo guionista de Abel, y cuando el guión estuvo listo lo revisamos. Al principio la historia llevaba un rumbo diferente al que tiene hoy y la muerte del padre de Augusto le dio un giro bastante interesante al guión. Es un proyecto que me gusta mucho y en el que además pude trabajar al lado de Danny Glover. Mi personaje es el de un “mirrey” agrícola bastante peculiar con el que se encuentra Danny ¿Qué es lo que viene, tienes algún proyecto en puerta? Próximamente voy a hacer una película en Rosarito, mi primer comedia romántica, con Karla Souza en inglés. Trata este tema de la frontera del que yo crecí tan cerca, esta dualidad cultural. Estar allá, además de lo interesante del proyecto, es lo que me gustó mucho del proyecto.

Si un actor en sus comienzos te pidiera un consejo ¿qué le dirías?

Que hay que ser minucioso y tomar orgullo de lo que uno hace. La carrera se construye de a poco pero con constancia, no hay muchas carreras instantáneas. Yo pienso que la actuación, lo mismo hacer una película o preparar una obra de teatro, es un trabajo casi artesanal. Hay sque ser paciente y prestar atención al detalle para llegar a donde uno quiere llegar.