5 momentos cumbre en la carrera de Anna Wintour
Le dicen Nuclear Wintour y con Devil wears Prada pensamos que era peor jefa del mundo, pues desde 2006 circula la leyenda urbana de que la novela que originó la película está inspirada en ella. Claro, la escribió Lauren Weisberger, una ex asistente, y nunca sabremos si como homenaje o venganza... El caso es que Anna Wintour tiene una carrera impresionante que, quizá, fue la que le forjó el carácter y el estilo por los que es famosa.
El origen: cuando decidió dedicarse a la moda (en los 60)
O también podría ser cuando decidió dedicarse al periodismo, pues contaba con el bagaje de su padre, el británico Charles Wintour, que editaba un periódico y a quien Anna aconsejaba para atraer a lectores más jóvenes, así que su gusto por la moda se unió a su vocación periodística. Y esto le sucedió en la adolescencia, cuando a los 16 años dejó la escuela para trabajar. Su padre le consiguió su primer puesto en una boutique y le pidió que estudiara moda, pero ella lo dejó pronto, pues Anna aseguraba desde entonces que "sabes de moda o no". Y el tiempo le dio la razón.
El tropezón: cuando la corrieron de Harper's Bazaar (1975)
Con el impulso y el prestigio de su padre, y con su talento, en 1970 parecía que Anna tenía todo a favor: trabajó en Harper's and Queen en Londres, donde se dice que empezó a tener buenos contactos con fotógrafos y a hacerse del carácter estricto y exigente que hasta hoy se le conoce. De ahí dio el paso a Nueva York, a Harper's Bazaar, en 1975, donde su trabajo no gustó a los editores por las extravagantes sesiones de foto que estaba acostumbrada a realizar y... la despidieron. Aun con este tropezón, consiguió trabajo en las revistas Viva y New York como editora de moda hasta que, en 1986, la llamaron de nuevo de Londres.
El inicio: editar Vogue UK (1986)
En 1986 comenzó a materializar su deseo de adolescente, trabajar en Vogue, y aunque estaba a cargo de la versión británica, mejoró su circulación y en el mundo de la moda ya es famosa una frase de ella que dijo en una entrevista al periódico que editaba su padre en los años 60, el Evening Standar: "(Quiero llegar a) un nuevo tipo de mujer. Está interesada en los negocios y en el dinero. Ya no tiene tiempo para comprar. Quiere conocer qué y por qué, dónde y cómo". Al parecer, esta visión hizo realidad su sueño dos años después.
Le dicen Nuclear Wintour y con Devil wears Prada pensamos que era peor jefa del mundo, pues desde 2006 circula la leyenda urbana de que la novela que originó la película está inspirada en ella. Claro, la escribió Lauren Weisberger, una ex asistente, y nunca sabremos si como homenaje o venganza... El caso es que Anna Wintour tiene una carrera impresionante que, quizá, fue la que le forjó el carácter y el estilo por los que es famosa.
Alonso Mateo posa junto a Anna Wintour en Paris Fashion Week.
El gran salto: editar Vogue EU (1988)
El año 88 del siglo XX marcó la vida de Anna Wintour y de buena parte del mundo fashion, no sólo porque llegó al puesto de editora en jefe de la edición más importante del mundo de Vogue, también porque no ha soltado el cargo desde entonces, y ya hablamos de más de un cuarto de siglo.
Se dice que el gran acierto de Anna fue reenfocar la revista a sus orígenes de moda, ya que la editora anterior a ella lo hizo hacia estilo de vida. Anna recordó a muchos expertos a otra legendaria editora de la revista, Diana Vreeland.
La cumbre: la nombran directora artística de Condé Nast (2013)
En marzo de 2013 le dieron a Anna Wintour el cargo que quizá muchos periodistas y diseñadores de revistas han soñado: la nombraron directora artística de una de las editoriales más grandes del mundo.
Ahora, además de editar Vogue y Teen Vogue, se encarga de la "visión creativa" de los 16 títulos restantes de la empresa, dijo en ese momento Charles H. Townsend, CEO de Condé Nast. "Se aprovechará la increíble visión y liderazgo de Anna", remató el jefe de una de las editoras más influyentes del mundo, no sólo de la moda; ahora sí.