Kim se queja de sobrepeso y promete comenzar intensa dieta

A pesar de su espectacular figura, Kim Kardashian emitió un "autollamado de alerta" en el que dijo reconocer que ciertas áreas de su cuerpo podrían ser más reducidas e hizo partícipes a sus seguidores en Twitter de lo "grave" de la situación: "¿Alguna de ustedes, mamás, se ha dado cuenta de que sus cuerpos ya no son los mismos? ¿Una forma diferente? Mis caderas y trasero ahora están enormes! Desde antes estaban grandes!" y continuó: "Creo que después de tener un bebé te emocionas tanto que ya perdiste algo de peso que empiezas a comer cómodamente y como lo hacías antes y entonces vuelves a ganar ese peso".

La estrella de reality acudió la noche del lunes al programa de Jimmy Kimmel y tal parece que vio algo de ella misma que no le gustó en pantalla, pues en otro mensaje afirma que comenzaría a hacer "ejercicio intenso" y dejaría los pretextos: "No veo que pueda deshacerme de estas últimas 15-20 libras de peso posparto. No más excusas, mi bebé ya tiene un año! UGH".

Kim admite que es muy difícil perder los kilos que ganó, pero deja ver que está decidida a lograrlo: "No lo llamaré peso posparto, porque esa es una excusa. Gané peso y eso es todo. Pero ¿por qué es tan difícil bajar después de tener un bebé?". Además la estrella reafirma a sus seguidores su compromiso en esta misión: "Necesito regresar a mi peso de hace algunos años. No me quejaré más. Comienzo la dieta HOY! No carbohidratos. Entrenamiento loco. ¿Quién está conmigo?"

Con respecto al programa, Kim llegó como invitada al famoso late night show con un look muy Kardashian: unos pantalones sueltos color crudo, un escotado bustier low-cuty una túnica larga de satén color esmeralda como statement piece, todo de la diseñadora rusa Ulyana Sergeenko.

Después de hablar por primera vez de algunos detalles de su boda con Kanye West, la socialité fue retada a jugar contra Jimmy Kimmel una competencia que consistía en cambiar y limpiar los pañales de algunos `bebés´ en un escenario muy real y divertido, el ganador sería el que cambiara más muñecos en el menor tiempo posible.

Durante la divertida competencia, Kim se mostró segura de lo que hacía ganando 4 muñecos contra 3, el título de `diaper-changing champion´, demostrando así sus habilidades de madre adquiridas con su hija North West.