Kim Kardashian habla por primera vez de los contratiempos en su boda
Tras la esperada boda de Kim Kardashian y Kanye West se filtraron varios "detalles" que salieron del control de los novios el día que se suponía todo debía ser perfecto, pues así lo habían planeado meticulosamente. Mucho se dijo al respecto de los cambios de último momento, pero fue hasta la noche de este lunes que la propia Kim reveló en el programa de Jimmy Kimmel qué fue lo que sucedió aquel 24 de mayo.
Luciendo un bustier blanco nada discreto bajo una túnica de satén, la socialité emitió las primeras declaraciones al respecto de su boda, cuyo festejo inició un día antes en el Palacio de Versalles en Francia. Kim dijo que sus invitados pasaron un gran momento en la cena pre-boda, pues bebieron "demasiado", especialmente su hermana Khloé: "Bebió demasiado la noche anterior y tuve que despertarla. Ella estaba recostada hacia abajo y conseguimos maquillarla mientras dormía, tenía tanta resaca", reveló.
Otro de los contratiempos con los que la pareja tuvo que lidiar de último momento fueron las ausencias de invitados VIP de último momento, entre ellos Jay Z y Beyoncé, pues sus nombres estaban grabados en una mesa de mármol: "Fue lo peor. Tratamos de poner pintura blanca cubriéndolos".
Durante la charla Kim confirmó por qué eligieron Francia e Italia como los sitios para jurarse amor eterno: "Nos enamoramos en París y quedé embarazada de nuestra hija en Florencia... quisimos compartir nuestra historia de amor."
Pero a pesar de las molestias, los recién casados no pueden negar que fue el gran día de sus vidas: "Fue la experiencia más increíble el hecho de poder compartirlo con tantos miembros de la familia y amigos. Queríamos que todos estuvieran en este camino de amor con nosotros."
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