Palazuelos quiere ser alcalde en 2016
El actor mexicano Roberto Palazuelos aseguró que aspira a ser alcalde de Tulum, Quintana Roo, por lo que en 2016 contenderá por el cargo con una agenda política basada en la sustentabilidad del centro turístico y de estrategias acertadas de promoción.
"Sí aspiro y tengo la mano levantada ya. Tulum es un lugar sumamente ecológico que uno tiene que cuidar mucho, porque si no se lo van a acabar, como se han acabado otros destinos turísticos de la zona", aseguró en entrevista con Notimex el también hotelero, en una visita a Miami.
Palazuelos, quien recién fue electo presidente de la Asociación de Hoteles de Tulum, una ciudad de 45 mil habitantes, señaló que ese cargo le ayudará a conseguir su objetivo, pues en algunos centros turísticos ese puesto es como el de un segundo presidente municipal.
"Ese cargo es el representante de quien genera la fuerza laboral y es el encargado de las estrategias de promoción, también de cuidar la sustentabilidad del destino y de coadyuvar mucho con las autoridades en todos los aspectos", expresó el también empresario.
El actor ofreció la entrevista como parte de la promoción en esta ciudad del sur de Florida de la telenovela Qué Bonito Amor, de la empresa Televisa para la que trabaja y que se transmite en horario estelar por la cadena estadounidense en español Univision.
"El Diamante Negro", quien da vida a un gángster italiano en el melodrama, también realizó en esta ciudad la grabación de varios programas de dicha cadena, como Sal y Pimienta, El Gordo y la Flaca y Despierta América.
Indicó que la telenovela en este momento se encuentra a la mitad en Estados Unidos y el pasado fin de semana concluyó en México con un nivel de audiencia de 24.81 puntos. Él lo atribuye a que toca el tema del tradicional mariachi mexicano, el cual fue reconocido como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
Por otro lado, señaló que pese a que siempre le han gustado los papeles antagónicos, en la vida real no es una mala persona y se declaró bastante respetuoso de la vida, de los niños, de la familia y de Dios.