Isabel Pantoja es condenada a dos años de prisión
Isabel Pantoja ha recibido en la mañana de este martes la sentencia por su implicación en el caso Malaya, el entramado de corrupción urbanística que también afecta a su anterior pareja, el ex alcalde de Marbella Julián Muñoz, y a la ex mujer de este, Mayte Zaldívar. La cantante ha sido declarada culpable de un delito de blanqueo de capitales y tendrá que abonar una multa de 1 millón 147 mil euros, aunque probablemente evite finalmente el ingreso en la cárcel al carecer de antecedentes penales y al haber sido condenada a una pena igual o inferior a 24 meses.
Aunque la eventual encarcelación de la veterana artista podría ser tomada en consideración --como medida excepcional-- por el magistrado, quien por el momento sólo ha hecho públicos los detalles formales de la sentencia, Isabel Pantoja ha sido la única de los acusados que ha podido respirar tranquila al escuchar la decisión del juez, ya que tanto Julián Muñoz como Mayte Zaldívar pasarán irremediablemente varios años entre rejas como consecuencia de diversos delitos. El ex regidor del municipio malagueño pasará un total de siete años en prisión por haber sido la cabeza visible de una red dedicada al lavado de dinero --lo que le reportaría cuatro años y medio de cárcel-- y por haber protagonizado varios episodios de soborno, un delito de cohecho castigado con dos años y medio adicionales. Por su parte, Zaldívar y su hermano pasarán entre rejas casi tres años y medio por haber contribuido al proceso de blanqueo de capitales durante más tiempo que la conocida intérprete.
El anuncio de la sentencia en la audiencia provincial de Málaga se ha visto rodeado desde primera hora de la mañana de una intensa expectación mediática, y los numerosos fotógrafos y reporteros agolpados a las puertas del juzgado han tratado sin éxito de arrancar una declaración a quien, además de sentarse en el banquillo de los acusados, se erige todavía como una de las figuras más emblemáticas de la cultura popular española. La posibilidad de que Pantoja fuera vista este martes como una persona en libertad por última vez ha sido uno de los temas que mayor repercusión ha generado en la crónica social de los últimos meses y, aunque con toda seguridad la estrella evitará la entrada en prisión, esta gran mancha en su expediente judicial constituye el culmen de una trayectoria llena de infortunios que comenzó tras el primer ingreso de Julián Muñoz en la cárcel y, a raíz de ello, la separación entre la tonadillera y el político.
Además de sus contratiempos judiciales y sus vínculos con la corrupción política, la cantante ha tenido que hacer frente recientemente a otras adversidades de carácter familiar, concretamente la ruptura de su hijo Kiko y su prometida Jessica Bueno. La pareja tuvo hace solo unos meses a su primogénito Francisco, el primer nieto de la artista, y estaba planeando pasar por el altar a finales de este año, un proyecto de vida en común que suponía también uno de los escasos motivos de alegría para la intérprete y que ahora se ha desvanecido por completo.
cd