Luis Miguel, en su primer concierto en México, fue muy cariñoso con el público
Con un concierto, quizá de los mejores en su carrera, Luis Miguel conquistó el corazón y alma de las casi diez mil personas que asistieron ayer al primero de sus shows en la Ciudad de México. Aunque se dice que siempre sus conciertos son muy similares, este tuvo muchas diferencias, entre las que más destacó fue su contacto con el público. En punto de las 20:45 horas, el cantante apareció en el escenario impecablemente ataviado con un traje negro, camisa blanca y corbata de puntos y pañuelo; su look de galán al que ya tiene acostumbrados a sus fans, sin embargo a diferencia de otras ocasiones, Luis Miguel se veía más cariñoso que de costumbre, muy relajado y algunos comentarios dicen que parecía haber subido un poco de peso. Este año no bajo del centro del escenario por una escalera, lo hizo de un costado y además sólo tenía una corista y no tres como siempre, además de sus 10 músicos de costumbre. Incluso cantó temas poco comunes en sus shows, como “Muchachos de hoy”, su éxito de 1985. Los cerca de 10 mil asistentes escucharon los más de 33 éxitos programados por el propio ídolo del romance, quien aseguró a sus fans un noche romántica como parte de su gira “The Hits Tour 2013”, un show retrospectivo por sus 30 años de carrera. “Mujer de Fuego” fue la primera canción, continuó así con "Suave", "Si Te Vas" y después ofreció unas palabras. "Buenas noches México ¿cómo están? Un placer regresar al Auditorio Nacional. Un aplauso a los que están arriba, en el segundo, en el primer piso. Un placer enorme... Gracias, gracias, gracias...", expresó la estrella mexicana, quien en ningún momento dejó de recibir piropos de sus seguidoras.
Durante la velada musical, el cantante no dejó de acercarse al filo del escenario para repartir saludos, recibir algunas rosas y otros regalitos que le obsequiaban pero sobretodo dejarse robar unos besos por algunos pequeños que se encontraban en el recinto de Reforma. En la gran mayoría de sus shows Luismi no convive tanto con los asistentes pero sí con sus músicos, a quienes regaña e incluso se le ve enojado por las fallas de sonido, sin embargo esta vez fue muy diferente, a pesar de sí darles instrucciones, nunca se le vio molesto y aprovechó el tiempo para tener más contacto con los presentes.
“El Sol”, como también se le conoce, dedicó una canción al público, su éxito “Por debajo de la mesa” por la estrofa que dice: “Y es que no sabes lo que tú me haces sentir, que no hay momento que no pueda estar sin ti”, pues aseguró que no puede estar sin su público. Su segundo cambio de ropa consistió en una camisa y chaleco negros, así como un cinturón plateado y zapatos de charol. Algo que nunca se había visto en sus espectáculos y que esta ocasión sí hubo, fueron pelotas y camisas negras que repartió entre los asistentes, todos con su nombre y el nombre de la gira.
La noche transcurrió con éxitos como “No sé tú”, “La Incondicional”, “Cuestión de Piel”, “Por Debajo de la Mesa”, mientras que entre los temas rítmicos estuvieron "Sol, Arena y Mar" y "Un Hombre Busca una Mujer".
Entre las más coreadas estuvieron: “Palabra de honor” y “La chica del bikini azul”. El momento del mariachi llegó, ya sin saco portando un chaleco negro, Luis Miguel interpretó temas como “El Rey”, “Échame a mi la culpa” y varias más. El concierto terminó cerca de las 23:00 horas y solamente en una ocasión volvió al escenario. Entre los asistentes resaltó la presencia y apoyo de Alejandro Basteri, hermano del cantante, quien acudió acompañado de su novia Xuxú, su mejor amigo, Gerardo Islas y Sherlyn.
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