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Ron Galella, anécdotas del paparazzo más famoso

Recibir un puñetazo de Marlon Brando es sólo una de ellas. Comenzó su carrera sin un afán sensacionalista, ahora el MOMA de Nueva York reivindica su trabajo.
mié 30 enero 2013 08:00 AM
Recibir un puñetazo de Marlon Brando es sólo una de ellas. Comenzó su carrera sin un afán sensacionalista, ahora el MOMA de Nueva York reivindica su trabajo.
Ron Galella Recibir un puñetazo de Marlon Brando es sólo una de ellas. Comenzó su carrera sin un afán sensacionalista, ahora el MOMA de Nueva York reivindica su trabajo. (Foto: Cortesía Ron Galella para la revista Quién)
Ron Galella captó apersonalidades como Robert Redford llegando a una fiesta de Mary Lasker en Washington, en 1974; y Jackie Kennedy cuando cruzaba la avenida Madison en 1971.
Ron Galella captó apersonalidades como Robert Redford llegando a una fiesta de Mary Lasker en Washington, en 1974; y Jackie Kennedy cuando cruzaba la avenida Madison en 1971.

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Cierra los ojos e imagina la Fontana de Trevi en Roma, de noche. En ella se baña Anita Ekberg con un provocativo strapless negro mientras Marcello Mastroiani la admira. Es la inolvidable y emblemática escena de La Dolce Vita de Federico Fellini, de 1960, secuencia que ya es parte del imaginario colectivo. Lo que no es tan conocido de ese clásico del cine italiano es que le dio nombre a uno de los personajes más desacreditados de nuestra época: el paparazzo. La ahora gastada palabra se originó gracias al nombre de uno de los personajes de La Dolce Vita, Paparazzo, un fotoperiodista interpretado por Walter Santesso.

"Ron escuchó la palabra, la adoptó y se autoproclamó el mejor paparazzo del mundo", comenta Leon Gast, director del documental de HBO Smash His Camera que expone la vida y el trabajo de Ron Galella. "Cuando Ron empezó, era el único que hacía esto. Tenía sus propias tácticas y reglas. En lugar de tomar la típica foto que todos captaban, él averiguaba dónde vivían las celebridades. Y tenía paciencia. Además de que era realmente bueno".

Los clics de Ron arrancaron en los años 50, nos dice en entrevista exclusiva con Quién: "Le debo mi carrera como fotógrafo a la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF, por sus siglas en inglés). Antes de alistarme en la USAF (1951-1955) trabajaba como artista en cerámica para la Asociación Americana de Artistas en Nueva York. Cuando el Ejército empezó el alistamiento por la guerra de Corea, decidí inscribirme a la USAF porque te enviaban a la escuela a aprender algún oficio. Y como lo más cercano que ofrecían a las artes era la fotografía, pues elegí eso".

Entre estrellas y estrellados

Ron estudió esta disciplina por cinco meses y después, mientras estaba apostado en Orlando, Florida, le encargaron tomar imágenes de accidentes de aviones y de celebridades visitando la base para un periódico. "Le compré mi primera cámara, una Rolleiflex, así como la Enciclopedia de la fotografía a mi sargento en la USAF", cuenta nostálgico. Tras esta experiencia, al salir de la Fuerza Aérea, Ron se inscribió en la Escuela de Diseño del Centro de las Artes de Los Ángeles, donde estuvo de 1955 a 1958 y obtuvo su licenciatura en fotoperiodismo.

"La única revista de esa época que publicaba algo similar a las fotos de los paparazzi de ahora era Photoplay, y en esa época no había paparazzi porque los departamentos de publicidad de los estudios cooperaban con todas las revistas", nos comenta Ron sobre el status quo cuando empezó a trabajar. "Quien me hizo convertirme en paparazzo fue Jackie (Jacqueline Kennedy Onassis). Celebridades como Jackie y Greta Garbo, que eran muy privadas y no iban a eventos seguido".

Son sus inicios, pero sobre todo la dedicación a su arte (incluso a costa de su salud; Ron tiene várices y debió operarse en repetidas ocasiones de las rodillas por estar parado tanto tiempo), su talento y su trabajo en el cuarto oscuro lo que diferencia a Ron Galella de las hordas de paparazzi que transitan las calles del mundo. "Ciertamente Ron estaba buscando tomar a las celebridades por sorpresa, captar la imagen espontánea", le contó Gast a HBO. "Pero no estaba buscando una instantánea sensacionalista. Cuando ves sus hojas de contacto te das cuenta de que Ron está consciente de cómo encuadra las imágenes. Es un artista. Eso me hizo ver que no era un canalla como lo habían etiquetado".

El episodio en Cuernavaca

Lo que lo une a estos fotógrafos de mala reputación son los escándalos, que nunca estuvieron lejos de la vida de este originario del Bronx, Nueva York, nacido en 1931. Sobre todo los juicios en los que se vio involucrado como antagonista de Jackie (el famoso juicio Galella vs. Onassis de 1972). Pero también haber recibido un puñetazo propinado por Marlon Brando, que le tiró cinco dientes. O haber sido golpeado aquí, en México. "Fue en Cuernavaca y Richard Burton mandó a tres tipos del equipo de rodaje a que me golpearan. Hasta pasé 45 minutos en la cárcel. Lo peor es que me destruyeron una semana de trabajo. Como 500 fotos", nos cuenta.

Ron siempre ha tenido sus principios bien claros en cuanto al oficio. "Los paparazzi de hoy tienden a provocar a las celebridades, creando series de incidentes para poder tomar fotos y venderlas. Los provocan, a la usanza de los viejos paparazzi italianos. Pero yo nunca hice eso. Para mí, eso no es ético. Nunca haría algo así". Es justo decir que el puñetazo de Brando estuvo un poco fuera de lugar. "Yo no lo provoqué", sigue Ron. "Me pidió que me acercara y me dijo: ‘¿Qué quieres?' Le pedí que se quitara los lentes de sol. Después de todo era de noche en Chinatown. Y su respuesta fue golpearme".

1) Andy Warhol. Cerca del Regency Hotel, el célebre pintor, el 1 de octubre de 1981, en la ciudad de Nueva York. 2) Elvis Presley. El legendario cantante del rock’n’roll al salir del Hilton Garden Inn del aeropuerto JFK, el 19 de julio de 1975, con destino al Coliseo de Nassau. 3) Madonna y Sean Penn. En la ciudad de Nueva York, a casi un año de haberse casado, la pareja se toma un descanso de los ensayos de la obra Goose and Tomtom para ir a comer. Teatro Mitzi E. Newhouse, en el Lincoln Ce
1) Andy Warhol. Cerca del Regency Hotel, el célebre pintor, el 1 de octubre de 1981, en la ciudad de Nueva York. 2) Elvis Presley. El legendario cantante del rock’n’roll al salir del Hilton Garden Inn del aeropuerto JFK, el 19 de julio de 1975, con destino al Coliseo de Nassau. 3) Madonna y Sean Penn. En la ciudad de Nueva York, a casi un año de haberse casado, la pareja se toma un descanso de los ensayos de la obra Goose and Tomtom para ir a comer. Teatro Mitzi E. Newhouse, en el Lincoln Ce


"Me aposté en una bodega en Londres durante un fin de semana. El viernes recibí un aviso confidencial de que el yate de Richard Burton y Elizabeth Taylor estaría anclado cerca de ahí, en la orilla del Támesis, y que iban a tener una fiesta. Y la única manera de obtener fotos era a través de las ventanas de dicho almacén", dice con voz emocionada sobre esta aventura de 1969.

"Así que le pagué al guardia unos 15 dólares para que me encerrara en el depósito hasta el lunes. ¡No pude salir en todo el fin de semana! Los fotografié y nunca me descubrieron. El almacén estaba lleno de ratas, pero busqué un lugar seguro donde puse mi saco de dormir. Soy un oportunista y era una oportunidad única".

Incluso por teléfono, es imposible no contagiarse con la energía que emana de este hombre de 80 años mientras narra sus mejores proezas para tomar una foto. No podemos evitar preguntarle qué fue lo más loco que hizo en pos de una imagen.

Adiós al arte

A diferencia del trabajo de Ron, la finalidad de las fotos de los paparazzi hoy día es capturar a las celebridades haciendo algo malo o vergonzoso. Todo el arte y el glamour que Galella buscaba han desaparecido. Pero, a pesar de que las mismas celebridades se quejen y la gente critique a los paparazzi, lo cierto es que cada uno de nosotros ha sido consumidor de alguna de estas imágenes en algún momento.

Mick Jagger y Jerry Hall. El 16 de enero de 1983, Ron recibió en West Hollywood, California, una señal muy directa de la pareja. `Mick hizo eso sólo para la foto. Yo le agradaba´.
Mick Jagger y Jerry Hall. El 16 de enero de 1983, Ron recibió en West Hollywood, California, una señal muy directa de la pareja. `Mick hizo eso sólo para la foto. Yo le agradaba´.


No es por nada que las publicaciones que llenan sus páginas con estas fotos se triplicaron en los últimos 10 años y son de las pocas revistas en el mundo cuya circulación iba en ascenso. Sin embargo, en estos difíciles momentos económicos, incluso la paga a los paparazzi ha disminuido.

Según TheDailyBeast.com, en 2008 había un boom de la industria de los paparazzi y todo lo que la rodeaba -incluidas las revistas-, pero tras la crisis económica, la burbuja se reventó también en este negocio. Según este sitio, el precio en general por foto ha caído hasta una tercera parte. Claro, hay celebridades como Angelina Jolie y Brad Pitt por las que se siguen pagando sumas exorbitantes, pero muchas veces tras arduas negociaciones.

Además de que el negocio no es tan rentable, muchas celebridades han perdido atractivo, por ejemplo, Britney Spears y Paris Hilton se están portando bien y Lindsay Lohan está tan devaluada y es tan fácil conseguir una imagen suya que su precio por imagen ha bajado a 500 dólares. Sin olvidar que ahora muchos famosos suben fotos personales a sus cuentas de Twitter o Facebook. ¿Cuántas imágenes de Demi Moore con poca ropa serán suficientes? El paisaje de la industria de los paparazzi está cambiando, sin duda.

1) La célebre persecución de Ron a Hepburn –que abarca una parte del documental Smash His Camera– culminó con esta foto en un estacionamiento del Teatro Ahmanson, tras su presentación en The West Side Waltz, en el Music Center de Los Ángeles, California, el 5 de marzo de 1981. 2) Bette Davis. El 21 de abril de 1974, la actriz llega a los ensayos para la entrega 28 de los premios Tony, en el Teatro Shubert de Nueva York.
1) La célebre persecución de Ron a Hepburn –que abarca una parte del documental Smash His Camera– culminó con esta foto en un estacionamiento del Teatro Ahmanson, tras su presentación en The West Side Waltz, en el Music Center de Los Ángeles, California, el 5 de marzo de 1981. 2) Bette Davis. El 21 de abril de 1974, la actriz llega a los ensayos para la entrega 28 de los premios Tony, en el Teatro Shubert de Nueva York.


"Rómpele la..."

Lo más interesante del documental de Gast, Smash His Camera (cuyo título en español sería "rompan su cámara" y proviene de algo que le dijo Jackie a sus guardaespaldas), es que en él se ven las dos caras de la moneda: el trabajo arduo y dedicado de este fotógrafo, pero también su obsesión con Jackie y el lado oscuro de su trabajo. Gast, quien con anterioridad ganó un Oscar por su documental sobre Muhammad Ali, When We Were Kings (1996), presenta con igualdad de voz y voto a los amigos y a los enemigos del fotógrafo. Le preguntamos a Ron qué diría a sus detractores y contesta sin dudar: "Los críticos no son gente que haga cosas. Sólo hablan y critican. Y yo soy alguien que hace cosas, alguien de acción". El paparazzo in chief recuerda sobre todo a Thomas Hoving, ex director del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York (el MOMA): "Fue muy malo al criticarme. Dijo que mis fotos no durarían más de 50 años. Pero la razón de que no crean en mis fotos, o en las de nadie más, es que coleccionan arte y no fotos. No consideran que la fotografía es un arte moderno".

Consejos de Ron Galella.
Consejos de Ron Galella.


Lo que es innegable es que las fotos de Ron Galella son un testimonio de nuestra era. En 50, 100 o 150 años estas imágenes le dirán a nuestros descendientes quiénes éramos y contarán la historia de nuestra loca obsesión por las celebridades. Además de ser un testimonio de nuestra moda, nuestros gustos y nuestra civilización. "La fotografía es una de las grandes artes. Con el clic de la cámara tienes todos los detalles. La ventaja es que puedes congelar un instante y congelar una expresión Y eso es en lo que yo era genial", sigue Ron. "Capturaba las expresiones de personas siendo ellas mismas. Y eso es lo que amo de mi trabajo".

Hoy el trabajo de Ron se muestra en siete galerías diferentes, el MOMA adquirió cinco imágenes para su colección (incluidas dos tomas de Jackie) y el documental de HBO sobre su vida y obra fue todo un éxito, incluso Leon Gast fue premiado como mejor director de documental en el Festival de Sundance 2010. "No esperaba todo esto ahora; significa que mi arduo trabajo, mi energía, mi pasión, mi perseverancia y mi amor al arte del fotoperiodismo han valido la pena", dice Galella.

Y... ¿se arrepiente de algo? "Mi único pesar es haber perdido las dos batallas legales con Jackie (uno de los temas centrales de Smash His Camera), por culpa de un juez tendencioso, Irving Ben Cooper. Está escrito en los libros legales que invadí la privacidad de Jackie y que la acosé, cosa que pienso que no fue cierta", dice Ron. "También creo que me debí casar antes. Pero conocí a mi esposa, Betty, ¡hasta que cumplí 48 años! Pero valió la pena la espera y ser idealista porque tenemos muchas cosas en común: la fotografía, el arte y ¡los conejos!".

Sin colgar la cámara

En estos momentos Ron está semiretirado. Aparte de fotografiar algunas alfombras rojas, pasa casi todo el tiempo en su cuarto oscuro, donde siempre suenan Andre Kostelanetz, David Rose y Frank Sinatra, revelando fotos o recorriendo su vasto archivo. Una de las personas que trabaja con él nos confirmó que se estima que Ron ha tomado entre tres y cinco millones de fotos.

Ron dedica mucho tiempo a sus libros, "sus hijos" como él los llama. Ha publicado 10 y está armando Jackie, My Obsession, de edición limitada, que estará listo en 2012. A pesar de todo lo que vivió y tuvo que sufrir por su manía por la ex primera dama, siempre será su más grande musa. "Hay muchas razones por las que la fotografiaba. Primero, ella para mí era el glamour personificado. No sólo por su belleza física. Guardaba cierto misterio que las estrellas de hoy día no tienen. Se exhiben demasiado. Jackie no daba entrevistas y nunca se detenía a posar y eso me gustaba; prefiero las fotos naturales, que te cuentan una historia, que son más como de fotoperiodismo. Jackie era mi sujeto ideal".

Finalmente, a fuerza de fotografiar celebridades, Ron se convirtió en una de ellas. De hecho, en estos momentos hay un equipo trabajando en un guión para hacer un largometraje sobre su vida. ¿Y qué actor le gustaría para interpretarlo? "¡George Clooney! Por supuesto". ¿Y para sus años jóvenes? "Pues James Franco o Adrian Grenier". Nada mal para un chico soñador y emprendedor nacido en el Bronx.

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