Las demandas más absurdas hacia los famosos
Las celebridades siempre son un blanco fácil de las demandas, estás pueden ser una forma para muchas persona de sacar dinero fácil, sin embargo pueden llegar a ser tan absurdas y en algunos casos irrelevantes que no parecen ser más que una manera de llamar la atención de los medios.
JUSTIN BIEBER
Apenas la semana pasada Justin Bieber pasó un “mal sabor de boca”, pues Wilson Betts, madre de una fanática que asistió al concierto del cantante canadiense en Portland, Estados Unidos, demandó a la estrella por haberla dejado sorda parcialmente durante su recital.
De acuerdo con distintos medios, la mamá de la joven nada más y nada menos está pidiendo una indemnización de nueve millones dólares, pues en la denuncia asegura que el intérprete alentó a sus fans a que ”gritaran más fuerte”, causándole la pérdida de audición.
Hasta ahora, no ha habido ninguna respuesta del cantante ni de sus abogados sobre la demanda.
KEVIN COSTNER
Otro artista que pasó por una situación similar fue el actor Kevin Costner, quien fue denunciado en junio pasado ante las autoridades correspondientes por su vecino Rick Grimm, por impedirle la vista de su casa en la playa Sick, cerca de Santa Bárbara. Según TMZ, los árboles de la residencia del artista le bloqueaban la vista desde su mansión al océano, por ello decidió demandar, con el argumento que trató de hablarlo en buen término sin recibir respuesta.
PARIS HILTON
Después de sus constantes demandas, en 2010, Paris Hilton fue denunciada por la compañía, Hairtech International, ya que al parecer la DJ había firmado un contrato para usar las extensiones de pelo de la marca y decidió usar otras. Por lo que la empresa exigía la exorbitante cantidad de 28 millones de euros por la falta.
MILEY CYRUS
Miley Cyrus enfrentó una querrellla en 2009, pues la cantante fue acusada por una mujer asiática de discriminación a los habitantes de su país, luego de que la intérprete publicara una imagen con sus amigos donde colocó sus manos al lado de sus ojos para hacerlos “rasgados”, por lo que la demandante le pidió cuatro billones de dólares.
Después de pedir una disculpa, el juez dijo que no había sido discriminación y la demanda no procedió.