Primer ministro británico olvida a su hija en un pub
El primer ministro británico y su mujer Samantha se llevaron ayer domingo un gran susto cuando se percataron de que la pequeña, de ocho años, se había quedado sola en un pub de la localidad inglesa de Casden donde la familia había estado comiendo con unos amigos. La pareja, que abandonó el local en vehículos diferentes, estaba convencida de que Nancy iba en el coche del otro, y pasaron unos 15 minutos hasta que el mandatario recuperó con alivio a su primogénita. "El primer ministro se quedó consternado cuando se dio cuenta de lo ocurrido. Afortunadamente, cuando telefoneó al establecimiento, le dijeron que la niña se encontraba en perfecto estado. El primer ministro volvió rápidamente al pub para recuperarla", aclaró un portavoz de Downing Street. La dramática confusión vivida por el mandatario británico, que iba acompañado también por sus dos hijos menores, se explica después de que la niña acudiera al baño sola y sin haber avisado a sus padres, que nunca imaginaron que Nancy se encontraba sin supervisión. A pesar de que el incidente se resolvió rápidamente y sin mayores complicaciones, el suceso no va a ayudar al jefe de gobierno a lidiar con una creciente reputación de "hombre relajado" que le atribuye últimamente la prensa inglesa, y que se verá plasmada próximamente en una biografía no autorizada. "Da miedo pensar que el primer ministro pueda olvidarse de algo tan importante como su propia hija. Si fuera tan fácil como coger el móvil, encontrar a David Cameron en la agenda de contactos, y llamarle, todo sería diferente", contó una fuente al diario The Sun.