Kristen Stewart, una Blancanieves más
Ayer se estrenó a nivel mundial la cinta Blancanieves y el cazador del director Rupert Sanders, con las actuaciones de Kristen Stewart, Chris Hemsworth y Charlize Theron.
Este proyecto significa para Kristen un nuevo reto, luego de ser ubicada como Bella en Twilight, ahora no se enfrentará a vampiros sino a una sexy bruja que es personificada por Charlize.
Sin embargo, ¿por qué contar otra vez la historia de Blancanieves? Son tanta las versiones que existen del cuento de los hermanos Grimm, que una más puede o no hacer la diferencia.
Aquí te dejamos un análisis de esta historia.
El cine tiene tantas versiones de Blancanieves porque la literatura también; la Europa renacentista vio nacer el famoso cuento mientras corría el siglo XVI, en el que se registra el primer antecedente de esta historia para niños.
El escritor italiano Giambattista Basile publicó su cuento Pentamerone, que narra cómo Lisa, una niña de 7 años, se clava un peine envenenado y cae inconsciente. La familia la cree muerta y la pone en un ataúd de cristal, pero la niña sigue creciendo. Una prima, celosa de la belleza de Lisa, la intenta matar quitándole el peine, lo que la despierta.
A este cuento le faltan algunos elementos de lo que conocemos hoy, pero tiene otros característicos de Blancanieves como la pariente celosa, el objeto envenenado y la inconsciencia de la joven que es confundida con su muerte.
Blancanieves y los 7 enanos (1931), versión Disney.
Después, Jacob y Wilhelm Grimm, inspirados en un pueblo alemán, crearon la versión más conocida de Blancanieves, esa que Walt Disney adaptó para su primer largometraje.
Titulado Schneewittchen, el cuento para niños de los hermanos Grimm describió a detalle a los personajes que conocemos hoy. Los escritores alemanes cuentan que una reina se pinchó el dedo mientras cosía y las gotas de sangre cayeron sobre la nieve. Esto ocasionó en ella el deseo de tener una hija con la piel tan blanca como la nieve, los labios rojos como la sangre y el pelo negro como el ébano.
El deseo de la reina se cumplió, pero al dar a luz a la princesa Blancanieves, ésta falleció. El rey se volvió a casar con una hechicera que tenía un espejo mágico y que, obsesionada con ser la mujer más bella, preguntaba a éste quién era la más hermosa.
Al cumplir siete años, Blancanieves se convirtió en la respuesta del espejo, por lo que la reina hechicera ordenó a un cazador que la asesinara en el bosque, pero éste se apiadó de Blancanieves y la dejó escapar, haciendo creer a la reina que la había matado.
Blancanieves encontró una casa en el bosque, perteneciente a siete enanos que le dieron asilo a cambio de sus servicios como ama de casa. Pero al enterarse la reina de que Blancanieves aún vivía, se disfrazó para acercársele y darle objetos envenenados; primero fueron unas cintas para el cuello, después un peine y finalmente una manzana que la dejó inconsciente, aparentemente muerta.
Los enanos le construyeron un ataúd de cristal para poder admirar su belleza y, después de un tiempo, un príncipe la vio y se enamoró. Éste decidió llevársela a su castillo y, en el traslado, un movimiento desatoró el pedazo de manzana en su garganta y la despertó. Blancanieves contrajo matrimonio con el príncipe y volvió a ser la respuesta del espejo ante la pregunta de su madrastra.
La reina, sin saber que su hijastra era la reina del país vecino, invitó a la pareja real a sus aposentos. Al encontrarse, Blancanieves le contó todo a su esposo y éste, enojado, obligó a la malvada madrastra a bailar con unos zapatos de hierro calentados al rojo vivo hasta que muera.
El historiador Dr. Karlheinz Bartels llegó a la conclusión de que los hermanos Grimm se inspiraron en Lohr, un pueblito alemán a las orillas del río Meno, para crear la historia de Blancanieves.
Según datos de Bartels, en Lohr existió una familia cuyo padre viajaba mucho por encargarse de las relaciones del pueblo con el exterior. Con su esposa, tenía una niña llamada María Sofía Margaretha Catharina von Erthal, quien es la inspiración de Blancanieves.
Cuando la madre de María Sofía murió, su padre se casó con Claudia Elisabeth María von Venningen, inspiración de la malvada madrastra por ser autoritaria y aprovecharse de la ausencia de su esposo para favorecer a sus propios hijos.
Además, Claudia Elisabeth tenía un impresionante y rico espejo de 1,60 metros de altura, regalo del padre de María Sofía, y se dice que habla por las leyendas que figuran en sus marcos, pero también por sus curiosas propiedades acústicas. Éstas hacen que al hablar cerca de él, las palabras resuenen gracias a la reverberación.
La residencia de la familia, el castillo de Lohr, es hoy un museo. En él se puede ver el ‘espejo mágico' de la historia de Blancanieves.
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