Ely Guerra, una voz por la conciencia
Eran las 5:15 pm y la cita fue en el Foro Sol de la Ciudad de México, varios artistas, entre ellos Café Tacvba, Caifanes, Enrique Bunbury, Calle 13, Julieta Venegas y Ely Guerra, unieron su talento para despertar conciencia en favor de la zona sagrada de Wirikuta.
Y fue con la inconfundible voz de Ely Guerra con la que dio inicio el Wirikuta Fest.
Su turno fue en el escenario rojo desde donde recordó sus inicios "Así empecé: nada más con una guitarra", para después dar paso a algunos de sus temas como "Mi playa", "Colmena" y "Peligro", entre otras.
Ely hizo hincapié en el porqué estaban todos reunidos, ahora que los mexicanos buscan un mayor despertar social.
"Hoy es un día importante, es un día social, todos nos hermanamos para alzar la voz en favor de una buena causa", dijo la cantante.
Ely, quien es parte de la lista de las "31 mujeres que amamos" de la revista Quién, se despidió de sus fans con un enorme agradecimiento por el apoyo que le han dado en sus 20 años de carrera.
"Hoy es tiempo de dar un grito de exigencia y respeto. Al mexicano se le respeta, su lugar y su condición, su filosofía y sus costumbres", dijo Saúl Hernández, vocalista del grupo mexicano Caifanes durante su actuación en el festival que reunió a 60.000 personas de acuerdo con cifras de la promotora Ocesa.
El español Bunbury también se unió a la lucha que indígenas huicholes, activistas y músicos entablaron para concientizar sobre la situación que enfrenta la zona de Wirikuta, asentada en el desierto del estado de San Luis Potosí que en 1999 fue declarada por la UNESCO uno de los 14 sitios naturales sagrados del mundo que deben ser protegidos.
En 2009, el gobierno mexicano otorgó 22 concesiones a la minera canadiense First Majestic para la explotación de plata. Expertos señalan que los impactos ambientales y culturales serán irreversibles, pues más de 60% de la superficie concesionada a dicha empresa se encuentra dentro del área natural protegida.
"Cada uno de nosotros hacemos hoy que Wirikuta esté en boca de todos... El respeto a la tierra no se cuestiona", dijo Bunbury ante un público eufórico que adoptó la frase "¡Wirikuta no se vende, se ama y se defiende!" como consigna.
En un momento del festival, Rubén Albarrán, vocalista de Café Tacvba, pidió al público realizar un ritual masivo de psicomagia a favor de Wirikuta, el que dijo, fue recomendado por el tarotista, director de cine, psicomago y escritor chileno Alejandro Jodorowsky.
"Este día ha sido super especial porque se han unido muchos corazones, uno de ellos es Alejandro Jodorowsky, quien nos ha mandado un regalo muy especial", dijo Albarrán para luego pedirle a las 60.000 personas tocar su pecho del lado de izquierdo, en donde se encuentra el corazón, y luego tomarse de las manos unos con otros.
La cantautora Julieta Venegas, que en pleno proceso de producción de su nuevo álbum se hizo un espacio para participar en el Wirikuta Fest, también dio un discurso sobre el poder que el corazón de las personas puede tener para realizar un cambio.
"Yo sé que mis palabras pueden sonar gastadas, pero si cada uno de nuestros corazones hace un giro realmente lograremos un cambio", expresó la tijuanense.
Fiel a su ideología política y social, René Pérez "Residente", vocalista del grupo boricua Calle 13, fue otro de los músicos que habló en contra del peligro que enfrenta Wirikuta.
"Está pasando en Panamá, Argentina, Ecuador y es importante demostrarle a todos los gobiernos latinoamericanos que un pueblo unido jamás será vencido", señaló "Residente", en cuya espalda pintó la leyenda "Yo soy 132" para manifestar su apoyo a los estudiantes universitarios mexicanos.