El `embarazo eterno´ de Jessica Simpson
Pareciera que atrás quedó la sexy bomba texana que cantaba “These boots are made for walking” caracterizada como Daisy Duke, pues desde antes estar embarazada, Jessica Simpson descuidó su envidiable figura y perdió uno de sus mayores atractivos: sus sexys curvas, al menos eso es lo que muchos opinan.
El bebé de Jessica Simpson aún no ha nacido y aunque falta muy poco, se ha dicho que pareciera que lleva más de nueve meses embarazada pues fotografías y publicaciones continúan presentándonos una Jessica que presume una pancita a punto de dar a luz y cada vez más grande desde mediados del 2011.
¿La razón? Es fácil, desde antes de embarazarse la cantante, de 31 años, dejó de procurar su figura y ya se mostraba con unos cuantos kilitos de más, atribuidos a su debilidad ante el pollo frito, las alitas de pollo con salsa BBQ, papas fritas con dip de queso y helado de galleta.
En octubre del año pasado, Simpson hizo oficial la noticia a través de su cuenta de Twitter en la que publicó: “¡Es verdad, voy a ser mamá!”.
La rubia ya estaba comprometida con el jugador de la NFL, Eric Jonson, quien también celebrará su segundo matrimonio.
En diciembre del 2011, la también actriz declaró en el programa de Rachel Ray no poder resistirse a sus antojos y comer con frecuencia macarrones con queso amarillo como desayuno y sándwiches con mantequilla de cacahuate y mermelada entre comidas, acompañados con un puño de sal.
Aún no se sabe qué sexo será el bebé pero recientemente fue captada por los paparazzi al salir de compras en Beverly Hills, dónde eligió mamelucos rosas. La futra Sra. de Johnson ha sido critícada por medios como el Daily Mail por vestir piezas que no favorecen su silueta y utilizar tacones muy altos a pesar de estar embarazada.
No queda duda alguna que los hábitos de Jessica no han favorecido su salud ni si figura.