Luis Miguel recuerda viejos éxitos

Ningún poeta o literato hubiera definido mejor la Arena Ciudad de México como lo hizo Luis Miguel durante el concierto inaugural del recinto la noche del sábado: "¿Está bonita no?...¡Very nice!".

Y es que con estas dos frases el "Sol" condensó más de 20 mil butacas, cinco mil cajones de estacionamiento, 6 mil metros cuadrados de pantalla led externa, 3 mil 500 metros de cancha, varios millones de dólares de inversión, 25 mil toleradas de acero y más de 5 mil empleos generados.

"Es un placer tener la oportunidad de celebrar esta noche 30 años en la música y también felicitar a esta bellísima, esta magnífica obra. La estamos inaugurando esta noche...está bonita ¿verdad?, ¡Very nice!", dijo Luismi a manera de bienvenida.

"¡Qué placer tan enorme y qué público tan maravilloso!. Gracias por estar conmigo (...) ¡Buenas noches México!", agregó.

Durante su actuación, el intérprete confirmó su estatus de grandeza. Fiel a su costumbre no "inventó el hilo negro" sobre el escenario, al contrario: se movió por terrenos seguros y escogió un repertorio que no tuvo queja de los fans.

"Te propongo esta noche", "Suave", "Por debajo de la mesa" y "Somos novios" fueron de las primeras canciones, las cuales de inmediato provocaron auténticos alaridos entre la gente.

Luis Miguel no tuvo una rutina escénica muy "desgastante", simplemente se limitó a sonreír, dar sus tradicionales pasitos de baile y caminar de un lado al otro. Eso sí, su voz sonó potente y muy bien cuidada a pesar del paso del tiempo.

La escenografía fue sencilla, estuvo basada en juegos de luces, proyecciones en las pantallas de video y el talento de 12 músicos que acompañaron muy bien la voz del "Sol".

Otras canciones que provocaron bastantes gritos fueron las poperas: "No me puedes dejar así", "Inevitablemente" y "Yo te necesito". La Arena Ciudad de México también mostró su faceta de mega karaoke y resistió los gritos de más de 20 mil personas.

Luis Miguel sólo tuvo un cambio de ropa. Tras 90 minutos de concierto el artista se despidió del público con una gran ovación. A su salida del conciertosu helicóptero estaba esperándolo en el helipuerto de la arena. Decenas de fanáticos se quedaron eserand la salida del cantante, aunque sólo vieran pequeños puntos moviéndose.