Aplauden a Arturo Ripsten en San Sebastián
Con mucha expectación y con aplausos fue recibida la premier mundial de "Las razones del corazón", del director de cine mexicano Arturo Ripstein y con guión de Paz Alicia Garcíadiego, en el Festival de Cine de San Sebastián. A primera hora fue proyectado el filme en el Teatro Victoria Eugenia y desde más de una hora antes la gente hizo fila en el emblemático Centro de Convenciones del Kursaal para esperar la segunda proyección de la película.
Al hablar de su última película, adaptación libre de los dos últimos días de Madame Bovary, el cineasta mexicano Arturo Ripstein destacó que probablemente uno de los personajes más conocidos de la literatura mundial sea el de Emma Bovary, y al mismo tiempo, "qué duda cabe", uno de los más desconocidos.
Aseveró que una lectora desapasionada el día de hoy de ‘Madame Bovary', de Gustave Flaubert, "nos revela a un personaje poco o nada admirable: egoísta, trepadora, infantil, ilusa", pero pocos, apuntó el cineasta se atreven a externarlo en voz alta. "Nadie puede rebelarse contra Emma Bovary. Mal pensar de Emma es mal pensar de Flaubert. Punto y basta", expuso.
En ese escenario, Ripstein explicó que en "Las razones del corazón" empezó a trabajar en una historia de adulterio visto desde los ojos del marido cornudo, pero aún así "Emma surgía". "Muchas veces traté de deshacerme de ella y centrarme en el marido desdeñado. Tantas otras volví a ella", reveló el cineasta, quien compite por la Concha de Oro en esta edición del Festival de Cine de San Sebastián.
Tras confesar que "hoy, luego de haber cedido a los reclamos de Emma, luego de haber seguido sus cuitas y sus desesperos, me pregunto cómo hizo para amarrarme a su enagua". Respondió él mismo que "fue la angustia de Emma, fue su pacto morboso con la muerte a la que aparentemente estaba buscando lo que me hipnotizó".
"Emma me imantó, me enamoró con su angustia, con la certeza de las pocas horas que le quedaban por delante. Porque esta mujer de tan pocas luces y alcances, frente a la muerte alcanza una extraña lucidez y amarga sabiduría que desdicen de tajo sus largos años previos", expresó.