Ovacionan a Adrián Alonso en ONU
El actor mexicano Adrián Alonso acudió la víspera en representación de México a la sede europea de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), donde pronunció un emotivo discurso como parte del encuentro ‘Jóvenes por los Derechos Humanos'.
El joven artista, quien fue elegido directamente por organizaciones no gubernamentales para representar a su país, fue ovacionado por un auditorio multinacional que, incluso, se puso de pie para agradecer las sencillas palabras que brindó en las instalaciones del foro internacional.
Previo a su participación en el encuentro, el actor comentó: "Me siento muy emocionado, y me doy cuenta de lo importante que es que la voz de una figura pública pueda ser escuchada en todo el mundo; ojalá mi discurso sirva de algo para estas causas".
Al tomar la palabra, Alonso expresó su sorpresa de haber sido invitado a un encuentro tan importante, donde se busca la difusión del punto de vista de la juventud acerca de los derechos humanos universales.
"De niño ni siquiera imaginé que un día sería actor... y ya de actor nunca imaginé estar hablando ante ustedes aquí en las Naciones Unidas".
Asimismo, comentó que por medio de su carrera ha podido "levantar la voz e invitar a los jóvenes a conocer nuestros derechos y obligaciones para que con honestidad y paso firme podamos crear conciencia de que entre nosotros no hay fronteras, y que los derechos son responsabilidades y beneficios, obligaciones y compromisos de ejercer la libertad que gozamos.
"He formado parte de la Asociación de Jóvenes pro Derechos Humanos, donde hemos realizado encuentros con jóvenes, adolescentes y hacemos convocatorias para colectas que van destinadas a causas nobles, como ayudar a los damnificados del terremoto en Haití", agregó.
Para finalizar su ponencia, el protagonista del filme "La leyenda del tesoro" se mostró satisfecho de creer que al menos una persona en el mundo ha cambiado su manera de pensar y actuar, por medio de esta importante labor.
"¿A quiénes hemos llegado? No sé si a cientos, a miles o a millones, con que una sola persona haya cambiado su perspectiva sobre el tema de los derechos humanos, me doy por satisfecho; ésta, como otras, es labor de uno a uno, de sembrar y creer en la siembra".