La vida fuera del ring

Fue una celebridad en los años 80 y 90. Lo mismo peleaba en Las Vegas por millones de dólares que era recibido por el presidente en Los Pinos. Pero así como en el ring era un demonio que no daba tregua a sus rivales, en su vida privada no sabía distinguir a sus enemigos. Malas compañías y decisiones lo tuvieron en crisis, que, afortunadamente, han quedado atrás.

Julio César se ve tranquilo en 2011. Su vida gira en torno a su familia y a las carreras profesionales de Julio César Chávez Jr., quien sigue con éxito los pasos de su papá, y Omar, su hijo que apenas empieza en los golpes. Incluso su sonrisa ha cambiado, pues sabe que quienes lo acompañan sólo quieren lo mejor para él, el gran campeón mexicano.

Y no hay momento más feliz para Julio César: el pasado 12 de junio ingresó en el Salón de la fama del boxeo junto a Mike Tyson y Silvester Stallone, entre otros famosos. Se lo ganó a pulso pues en 22 años de carrera profesional tuvo 112 peleas, 107 victorias, seis derrotas, dos empates y 86 nocauts. Fue campeón mundial en Superpluma, Ligero y Superligero. Tiene el récord mundial de 39 peleas de título mundial y estuvo invicto durante 90 pleitos. Pero más allá de récords y números, hoy Chávez quiere gritarle al mundo que vive su mejor revancha.

_{Texto tomado de la edición 246 de la revista Quién.}