La vida sin Saramago

Pilar del Río fue la pareja y traductora de José Saramago . A casi un año de la muerte del Premio Nobel de Literatura 1998 , su viudavisitó México para presentar José Saramago: el último cuaderno, un libro que reúne las intervenciones del escritor portugués en su blog. Aprovechamos para platicar brevemente con ella.

¿Cómo es la vida sin José Saramago?

Yo no vivo sin Saramago, por el contrario, vivo dentro del proyecto cívico de Saramago. Eso sí, echo de menos no poder pedirle opinión sobre lo que hago.

¿Cómo influían los amigos en el día a día del escritor?

Él era muy solitario y tartamudo. Durante muchos años tuvo problemas para expresarse, por eso era un poco taciturno. Decía que los libros tienen personas dentro, no era un hombre de muchos amigos, pero sí de grandes lealtades. Era leal a Carlos Fuentes, a quien le agradecía haberlo presentado como escritor portugués en México; respetaba y le parecía un esplendor la obra de Juan Rulfo, de Gabriel García Márquez.

¿Qué acontecimiento actual no le hubiera gustado perderse?

No puedo interpretar a Saramago, sólo sé que escribió Ensayo sobre la lucidez, donde dice que hay sociedades que pacíficamente salen a la calle y consiguen echar a los sátrapas. Saramago era partidario de la insurgencia cívica frente a los que tratan de tomarnos el pelo. Esto pasó en Egipto, pero él lo había escrito antes.

¿Qué recuerdo tienes de tus últimos días con él?

Guardo, uno por uno, todos los momentos de esos días, porque sentí que eran los últimos. Unos días antes, mientras desayunaba, me dijo: "Somos felices, ¿verdad?"

¿Habrá más libros de Saramago?

Habrá un libro de juventud inédito. Nunca se lo publicaron. Él lo perdió y 40 años después apareció en la editorial y dijeron que estarían encantados de sacarlo a la venta. También se va a editar un libro que él empezó, se publicará tal cual lo dejó.

_{Texto tomado de la edición 240 de la revista Quién.}