Slim, Salinas Pliego y Azcárraga: guerra de titanes
La última vez que Carlos Slim, Emilio Azcárraga Jean y Ricardo Salinas Pliego estuvieron bajo el mismo techo fue el pasado 9 de octubre en la boda del hijo del hombre más rico del mundo, Carlos Slim Domit con María Elena Torruco.
Aunque los empresarios competían en la cancha de los negocios, el terreno social siempre había sido un espacio de tregua. Pero ya no más.
El pasado 1 de marzo, en medio de la batalla empresarial más importante (o por lo menos ruidosa) de la historia de los negocios en México, Slim inauguró el nuevo museo Soumaya en honor a su difunta esposa.
Y algo que sorprendió fue que Azcárraga Jean, dueño de Televisa, estuviera en el evento y estrechara la mano de Slim, sin embargo asombró aún más que Ricardo Salinas Pliego no asistiera. Hasta ese día, quizá unos meses antes, el propietario de Grupo Salinas le había sido fiel a Carlos Slim. Su ausencia fue una señal clara de que la guerra por el negocio de las telecomunicaciones había podido más que toda amistad.
Comienza la batalla
Slim, Salinas Pliego y Azcárraga Jean piden entrar a más mercados, para hacer más negocio de una industria valuada en 30,000 millones de dólares, pero defendiendo con los dientes los negocios en donde son reyes, esto de acuerdo con la edición del 1 de abril de la revista Expansión.
Las televisoras lideradas por Ricardo Salinas Pliego y Emilio Azcárraga ya cuentan en su sistema de cable con el servicio triple play (telefonía, TV de paga e Internet); mientras que Telmex está listo para dar televisión y pide que cambien su título de concesión.
Por otro lado las televisoras piden que Telcel baje las tarifas de interconexión para poder tener más maniobra en la oferta de telefonía celular y triple play, sin embargo nadie quiere ceder.
Por su parte Arturo Elías Ayub, director de Asuntos Corporativos de Telmex y yerno de Carlos Slim, afirmó a la revista Expansión que se deben revisar las tarifas y no basarse en presiones mediáticas.
"Hay que revisar bien las tarifas de interconexión y no basarlas en presiones de los medios ni en mitos", aseguró Elías Ayub.
Pleito público
No es la primera vez que estos empresarios se enfrentan, sobre todo Slim y Salinas Pliego contra Azcárraga Jean, pero en esta ocasión hay tres factores que hacen la lucha distinta: su pleito es público, lo han llevado a tribunales, y un aliado estratégico para el hombre más rico del mundo ahora está de lado del dueño de Televisa.
En febrero de este año el pleito se hizo público cuando Grupo Carso, propiedad de Carlos Slim, retiró su publicidad de Televisa y TV Azteca, pero la declaración de guerra se dio desde diciembre de 2010 con el llamado "Acuerdo Navideño" en el que sólo Telefónica de México estuvo de acuerdo con las tarifas de interconexión propuestas por Telmex-Telcel (ambas controladas por Slim).
La falta de facultades de la Comisión Federal de Telecomunicación (Cofetel) para poner las reglas del juego y permitir que todos participen en cualquier negocio, sea televisión restringida, telefonía fija o móvil, e Internet, han llevado este enfrentamiento a los periódicos y los sitios web, con desplegados y banners.
Por lo que Mony de Swaan, presidente de la Cofetel, considera que ésta es una oportunidad que no se puede desaprovechar, "la de que estén todos los jugadores en los bandos correspondientes". Mientras que el Gobierno tratará de llegar a un acuerdo con los interesados a través de reuniones extraoficiales. Si esto no basta, entonces podría recurrir al factor político.
¿Quién fue el fiel de la balanza para iniciar la "batalla"? La respuesta se encuentra en la edición 1062 de la revista Expansión que ya está a la venta.