Eva Longoria no la está pasando bien
Primero fueron las supuestas infidelidades de su marido las que terminaron con su matrimonio ; después los rumores sobre presuntas infidelidades de ella las que afectaron su reputación; sin embargo, la mala racha de Eva Longoria se ha prolongado y llegó a sus negocios, concretamente a su restaurante Beso.
El lujoso restaurante del City Center, en Las Vegas, se declaró en suspensión de pagos. De acuerdo con medios estadounidenses, su deuda podría superar los seis millones de dólares. La medida busca protección legal para mantener el local funcionando y evitar un cierre. Longoria es dueña de una tercera parte de esta sucursal, con la que ya tuvo problemas en meses previos, cuando dos ex empleados, Ronan y Mali Machum, la demandaron acusándola de obligarlos a dejar sus puestos de trabajo.
Eva, no obstante, ya tomó sus propias medidas y las más destacada hasta hoy implica una serie de fotos en Twitter, donde posa de forma sexy adentro del restaurante. Aunque las fotografías de su cuenta no son de una gran calidad, se ve a una fotógrafa profesional tomando otras, que seguramente serán publicadas posteriormente.
Sin embargo las cosas con Beso no terminan aquí, pues la sucursal de Los Ángeles le trajo otro problema. Eva fue demandada por uno de sus socios, quien la acusa de fraude.
Mali Nachum dice que ella literalmente es una usurera, por eso reclama cuatro millones de dólares. De acuerdo con su versión, la actriz le prestó un millón de dólares y ella misma estableció la tasa de interés, por lo que en sólo dos años la deuda alcanzó los 4,6 millones de dólares. Nachum y sus abogados sostienen que esto es contrario a las leyes californianas y que ella afecta su inversión, por eso pide la compensación.