Kylie Minogue, un ícono gay
Será por sus outfits irreverentes y glamorosos, por sus videos sensuales o por su belleza casi angelical, la realidad es que ni la misma Kylie Minogue sabe las razones exactas por las que la comunidad lésbico gay la ha tomado como un estandarte de su movimiento, pero eso a ella le encanta.
Para ejemplo basta un botón, pues en su pasada visita a la Ciudad de México un tumulto de personas se arremolinaban en una de las entradas del hotel Four Seasons, varios, muy jóvenes, portaban banderas de arcoiris y cartelones en apoyo a su diva.
"Uno no elige ser considerada un icono gay, yo no hice nada para que esto sucediera, pero lo soy y me da gusto... es algo muy importante para mi, ahora que está sucediendo", dijo con una bella sonrisa.
Desde finales de los noventa, varios integrantes de la comunidad gay la han elegido como un estandarte, pero fue en 2007 cuando se ganó el título oficial, pues una encuesta realizada por la empresa Onepoll en todo el mundo arrojó que Kylie era el icono gay favorito de miles de personas.
Además, desde entonces ha participado en varias ocasiones en el festival Lesbian Mardi Gras, que se lleva a cabo en Sydney, Australia.
Sobre la ley aprobada en el Distrito Federal para que personas del mismo sexo puedan casarse, ella dijo que le parecía un ejemplo para muchos otros países en los cuales todavía discriminan a este grupo.
"Yo creo en el amor, no tiene sentido para mi que haya discriminación en este tema. Es un derecho, nunca lo cuestionaría", aseguró firmemente.
Y agregó que su mentalidad en respecto a este tema se debe a que no fue educada con estándares religiosos ni en el seno de una familia conservadora.