Emilio Estefan lanza autobiografía
Emilio Estefan, el productor musical cubano, restaurantero, empresario de bienes raíces y quien ha producido 31 galas en la Casa Blanca, descartó la posibilidad de dedicarse a la política en Estados Unidos ni en una Cuba futura. "Yo lo único que quiero es que mi país sea libre algún día", dijo Estefan de 56 años y quien salió de la isla desde que tenía 14 años para vivir en el exilio, al presentar su libro autobiográfico titulado "Ritmo al éxito". El influyente músico ofreció una entrevista a Notimex en un lujoso edificio de Miami Beach que sirve como centro de operaciones de "Estefan Enterprises", el emporio millonario que ha logrado edificar a través de su carrera junto a su esposa, la cantante Gloria Estefan. Y es precisamente ese éxito el que quiere compartir con los hispanos en su libro, la primera incursión literaria del influyente productor musical, una autobiografía que según dijo, tiene el objetivo de ayudar a otros inmigrantes. "Con una sola persona que siga el ejemplo y logre triunfar, me doy por satisfecho", afirmó el productor sentado cómodamente en el "penthouse" del edificio en el que se observan a la entrada las placas de los 19 Grammys que ha ganado.
"Contra todos los pronósticos tuve la oportunidad de alcanzar el éxito en este país y quiero ayudar a otros hispanos a que sigan mi ejemplo", aseguró el empresario, quien acaba de ser designado por el presidente Barack Obama para estudiar la posibilidad de abrir un museo en Washington dedicado a los latinos. Estefan dijo que fue motivado a escribir su historia personal como una manera de inspirar a otros a perseguir sus sueños y que las próximas generaciones sepan cómo logró el éxito y los motive a lograr sus propios sueños. El productor señaló que el gran secreto que revela su libro es que él logró transformar todo lo negativo en positivo y que dedica el volumen a cualquier joven con el sueño de convertirse algún día en el primer presidente hispano de Estados Unidos. En 34 capítulos Estefan revela cómo siendo muy joven tocó con su banda donde lo llamaran, mientras planeaba su estrategia para imponer en el mercado anglosajón el "Sonido de Miami", la mezcla de ritmos que logró con temas como "Conga" en 1985. Además de sus premios en la música, en la actualidad Estefan posee un doctorado honorario en música de la Universidad de Miami, una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.
Junto a su esposa Gloria posee la cadena de restaurantes "Bongos Cuban Café", el más exitoso de Disney en Orlando y con sucursales en México. La pareja, residente en la exclusiva Star Island de Miami Beach, posee hoteles en Vero Beach y en Miami Beach, además del restaurante "Larios" en South Beach. Acaban de comprar una participación minoritaria en lode Delfines de Miami de la NFL y el imperio incluye también parte del sello Crescent Moon Records, así como estudios de grabación, gerencia de talentos, producción de música, autoría de letra musical y producción de cine y televisión. "Son unas dos mil personas las que trabajan para nosotros y estoy orgulloso de ello", dijo Emilio sobre la empresa que maneja todos los días desde que se levanta a las seis de la mañana, porque afirma que padece de Síndrome de Deficiencia de Atención, una condición que aprovecha para siempre estar ocupado en un nuevo proyecto. En ese sentido, dijo que este año trabajan para realizar algunas películas que reflejen mejor al hispano en Hollywood, que ya no es el delincuente, ni el que se emplea en los servicios, sino el que es profesional y empresario emprendedor. Lo anterior lo mencionó porque afirmó que en este momento la música no es negocio, y no lo será hasta en unos cinco años.
Según Emilio, la internet y la facilidad para conseguir música han afectado mucho a la industria discográfica y hasta que no haya una regulación más estricta, no se recuperará. El valor de la fortuna de los Estefan es un secreto. "De eso no hablo", dijo Emilio, pero hace una década "El Miami Herald" la calculó en unos 650 millones de dólares. Emilio afirmó que la crisis hipotecaria no afectó sus negocios en bienes raíces, porque sus inversiones están en mercados que no han sido tan afectados y siempre compran de contado.