El enlace de La Gaviota nunca existió
La actriz Angélica Rivera nunca tuvo ningún lazo religioso que la uniera con José Alberto Castro, con quien celebró una boda en el fraccionamiento El Paraíso, en Acapulco, en diciembre de 2004, así lo confirmó el obispo Felipe Aguirre Franco, publica en periódico Excélsior. “En la Diócesis de Acapulco y en general en todo el mundo, los obispos no permiten que se celebren bodas fuera de las capillas y templos autorizados para el sacramento del matrimonio, puesto que se corre el riesgo de la comercialización, del individualismo y de la emancipación de la autoridad de la Iglesia”, dijo monseñor Aguirre. “La dificultad no son las playas ni las capillas, porque para atender a los turistas los sacerdotes van constantemente los domingos o en las celebraciones de Navidad, Pascua, Semana Santa, y otros momentos importantes para las celebraciones de la comunidad. “Lo que está en juego es la dignidad de los sacramentos. Éstos no deben ser expuestos a la comercialización e individualismo o ser organizados fuera de la competencia de la Iglesia, porque todo sacramento se realiza en la Iglesia, desde la Iglesia, por los ministros de la Iglesia y en los lugares adecuados para ello”, agregó el prelado. El religioso dejó claro que en ningún momento existió la posibilidad de que se haya autorizado un enlace religioso en las condiciones en que La gaviota, como se le conoce a la actriz, se casó con el productor de televisión. “Ni el obispo auxiliar, ni los vicarios episcopales, ni el vicario general, ni los decanos, ni los párrocos pueden asistir válidamente a un matrimonio en hoteles, playas o capillas no autorizadas. Si alguien dice: ‘yo obtuve permiso del obispo’, es falso”, aseguró. Como Excélsior lo dio a conocer el 14 de marzo pasado mediante la explicación del sacerdote José de Jesús Aguilar, director de Radio y Televisión de la Arquidéocesis Primada de México, ninguna celebración religiosa es válida si se lleva a cabo en una playa, jardín o salón. “En México están prohibidas las bodas y otro tipo de celebraciones religiosas en playas, hoteles y jardines, cualquier sacramento que se celebra en esas condiciones está yendo en contra de la autoridad del obispo y también es motivo para declarar nulo un matrimonio”, afirmó Aguilar en aquella ocasión. Así fue el caso de Rivera y Castro, quienes después de 11 años de vivir en unión libre, decidieron unirse en matrimonio el 11 de diciembre de 2004 en un fraccionamiento de Acapulco, lugar que no reunió las condiciones necesarias que solicita la Iglesia. Tres años después, en 2007, la pareja tramitó su divorcio y un año más tarde la actriz encontró el amor en Enrique Peña Nieto, gobernador del Estado de México, cuando el funcionario la invitó a participar como imagen de la campaña publicitaria en la que se daban a conocer los avances que alcanzó la entidad en materia de bienestar social. Desde noviembre de 2008 el político y la actriz aceptaron su relación y, aunque oficialmente no se ha hablado de una boda, todo apunta que así será, ya que fue la propia Rivera quien inicio el trámite correspondiente para anular el enlace religioso con Castro, acudiendo a las oficinas del Arzobispado de México, en marzo de este año. Cabe destacar que, aunque las playas son lugares donde no se permite este tipo de enlaces, Xcaret es el único sitio que sí está autorizado para ese propósito porque en este paradisiaco escenario hay una capilla donde diariamente se ofician misas. Para finalizar, monseñor Felipe Aguirre confirmó que existe la posibilidad de validar matrimonios que se hicieron en la playa u otros sitios. “Quienes se casaron en lugares prohibidos y desean validar su matrimonio pueden ir a las oficinas del Arzobispado para mostrar su buena voluntad y corregir las anomalías. “El trámite es muy sencillo. En ocasiones sólo se repiten las promesas ante un testigo oficial. Quienes reciben el comprobante de nulidad pueden contraer nuevas nupcias pero reciben una amonestación para que no vuelvan a cometer ese error”, concluyó. Su proceso Diciembre de 2004. La pareja celebró su boda en un fraccionamiento de Acapulco. 2007. Inició el trámite de su divorcio civil. 2009. La actriz solicitó la anulación religiosa de su enlace con Castro.