Barack Obama se mofa de sí mismo
El presidente Barack Obama hizo bromas sobre sí mismo y acerca del orden establecido en Washington, durante la cena anual de la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca, el sábado por la noche.
La cena, por la que se cobraron 200 dólares por comensal, atrajo a muchas personalidades ajenas a Washington. Entre los asistentes figuraron Eva Longoria Parker, Ashton Kutcher, Christian Slater, Natalie Portman, Sting, Mariska Hargitay, Steven Spielberg y Jon Bon Jovi.
Obama habló a ratos seriamente, pero también hizo comentarios jocosos sobre su uso frecuente del teleprompter —la pantalla desde donde lee sus discursos— y acerca de la inclinación del vicepresidente Joe Biden a hablar con demasiada franqueza.
Los republicanos también fueron el blanco de los chistes. Obama dijo que el ex vicepresidente Dick Cheney no pudo llegar a la cena, porque estaba escribiendo sus memorias, tituladas "Cómo balear a los amigos e interrogar gente". Fue una referencia al apoyo de Cheney a técnicas cuestionables de interrogatorio en Guantánamo y al disparo que le dio accidentalmente a un compañero de cacería.
Obama abordó también algunos temas con seriedad y habló de los problemas por los que atraviesa la industria de la prensa escrita. Elogió además a los periodistas por llamar a cuentas a los funcionarios gubernamentales.
El presidente no fue el único que hizo bromas.
La comediante Wanda Skyes, quien estuvo a cargo del entretenimiento durante la velada, bromeó sobre el hecho de que Obama le haya regalado a la reina de Inglaterra un iPhone durante su visita reciente.
"¿Qué le va a regalar al Papa, un Bluetooth?", preguntó Sykes. Y opinó que la primera dama Michelle Obama le había dado una palmadita en la espalda a la reina como si la monarca hubiera sido un beisbolista y "se hubiera deslizado recién en el plato. '¡Bien hecho, reina!'"
También estuvo presente el piloto Chelsey "Sully" Sullenberger, considerado un héroe después de que acuatizó un avión comercial en el Río Hudson sin que ningún ocupante muriera, así como Richard Phillips, retenido como rehén por los piratas somalíes después de que fue atacado su carguero.
Las ganancias por la cena ayudarán a organizaciones que combaten el hambre y financiará becas para estudiar periodismo.
La Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca se formó en 1914, como una organización de enlace entre la prensa y el presidente. Todos los mandatarios desde Calvin Coolidge han asistido a la cena.