Plácido Domingo es homenajeado por la Ópera Metropolitana
Un pasado de fábula y un futuro promisorio se unieron en una gala única de la Ópera Metropolitana: una triple celebración por sus 125 años de historia en la que sus astros ofrecieron adelantos de sus próximos papeles y se rindió tributo a Plácido Domingo por sus 40 años con la compañía.
Con pasajes de 23 óperas distintas, desde arias breves hasta grandes escenas, las festividades se extendieron más de cuatro horas la noche del domingo.
Gran parte del encanto se debió a la recreación de viejos escenarios y trajes de producciones pasadas, algunas a través de la magia del video. La famosa imagen de Enrico Caruso en el papel de Dick Johnson a punto de ser ahorcado durante el estreno mundial de "La Fanciulla del West" de Puccini, en 1910, cobró vida de la mano de Domingo, quien interpretó el aria "Ch'ela mi creda".
El tenor español reapareció al final del primer acto en una recreación de la última escena de "Parsifal" de Wagner, una representación de 1903 del templo del Santo Grial, completada con una paloma blanca revoloteando sobre los caballeros como Wagner la había vislumbrado.
Domingo estuvo espléndido toda la noche. En las arias de Puccini, Wagner y una del "Otelo" de Verdi, cubrió terreno familiar en papeles a los que en su mayoría ha renunciado. Pero el plato fuerte de su actuación fue el extendido dueto del primer acto de "Simon Boccanegra" de Verdi, para el personaje principal y su hija perdida, Amelia.
No sólo fue este un nuevo papel para Domingo, sino que está escrito para un barítono. Pero parece haber encajado bien con la calidad de su voz, y Domingo y la soprano Angela Gheorghiu mezclaron sus voces maravillosamente.
El director musical de la Met James Levine, quien cumple cuatro décadas con la compañía en dos años, dirigió la orquesta con inagotable energía.