Rob Schneider desea trabajar con mexicanos

El actor y director de cine estadunidense, Rob Schneider recibió el cariño y aplauso de la gente en la desangelada alfombra roja de la premier de la película A prueba de hombres, la noche de este jueves, en la ciudad de México. En una conocida plaza comercial del Paseo de la Reforma, en donde las estrellas mexicanas brillaron por su ausencia, pese a la promesa de que por el tapiz dispuesto para la ocasión desfilarían celebridades del espectáculo, el más conocido del ámbito nacional fue el productor Jordi Rosado, quien no ocultó la amistad que ha logrado con el comediante californiano. Tras una larga espera, Rob Schneider llegó al complejo cinematográfico, donde saludó al público y expresó su deseo de trabajar con algunos actores mexicanos, entre ellos Diego Luna, además de manifestar su admiración por la riqueza cultural y gastronómica del país. Acompañado de su hermano y productor, John Schneider, el cómico y guionista, protagonista de películas como Este cuerpo no es mio, The animal y Gigoló por accidente, posó para las fotos, enfundado en un traje color beige a rayas en manta cruda, después de decir: "Amo a México". Atrás quedó esa desoladora alfombra roja, para dar paso a la proyección de una película, que logró éxito rotundo en 2007, cuando se estrenó en Estados Unidos y que ahora estará en las salas de cine de México, sobre todo en las principales ciudades. El filme de comedia tiene una duración de 105 minutos, y es patrocinado por el canal de televisión por cable Golden, hizo reír a los asistentes que acompañaron a Rob Schneider en la premier, toda vez que el estreno será el próximo 6 de febrero a nivel nacional. Protagonizada, además de Schneider, por actores como David Carradine, Jennifer Morrison y Scott Wilson, entre otros, la película narra la divertida historia de un menudo hombre que pone a temblar a los presos de una prisión, ante sus habilidades para pelear. En su debut como director, Schneider interpreta a "Stan Milton", un egocéntrico timador de éxito que lo tiene todo: una bella mujer (Jennifer Morrison), una mansión en los suburbios, un lujoso auto deportivo y dinero de sobra. Sin embargo, la última estafa inmobiliaria más reciente de Stan sale mal. Es arrestado por fraude, juzgado y condenado a cumplir su sentencia en una prisión de máxima seguridad llena de asesinos, violadores y ladrones. Para sobrevivir a su encarcelamiento, "Stan" aprende rápidamente artes marciales antes de que se aplique su sentencia, para ello recurre a un profesional conocido como el "Maestro" (David Carradine), el legendario KunFu. El intenso curso le permite mantener a raya a los reclusos más sanguinarios de la prisión, antes de poder siquiera pensar en sobrevivir en la cárcel y quizá incluso redimirse por el camino. Cuando acaba entre rejas, las cosas se complican todavía más, porque el diminuto "Stan" empieza su aventura carcelaria por convertirse en el preso más temido del patio, con resultados que a él mismo le sorprenden, pero acaba por enfrentarse a un corrupto alcalde que quiere seguir sus pasos en la estafa inmobiliaria.