Reina Sofía presenta su libro

De la familia real española, y en especial de la princesa Letizia se ha dicho de todo: que es anoréxica, que es estéril, o que una de sus hijas es autista, “pero la Casa Real no debe defenderse”.

Al menos esta fue la respuesta que la Reina Sofía dio a la periodista Pilar Urbano, quien presentó este jueves en Madrid su libro titulado La Reina Muy de Cerca (Editorial Planeta). Se trata de un texto de 320 páginas que revela lo que la Reina piensa y siente de importantes temas, y que ya el primer día de su publicación ha levantado una gran polvareda, pues si bien la esposa del Rey Juan Carlos opina que los gays pueden casarse, matiza que a eso “no se puede llamar matrimonio”.

Pilar Urbano, quien fue recibida en La Zarzuela por la Reina en varias sesiones de entrevistas, cuenta que esos encuentros fueron completamente sinceros y abiertos; un diálogo entre mujeres en el que la Reina contestó hasta donde pudo, con la limitante de saber que “no tiene libertad de expresión”.

Urbano asegura que preguntó lo que la gente quiere saber: “Majestad, ¿Cómo se enteró del flechazo entre el príncipe Felipe y Letizia?, ¿piensa el rey de abdicar?, ¿las puertas de La Zarzuela están cerradas para Jaime de Marichalar?, ¿la infanta Leonor es una ‘infanta mestiza’, sangre roja y sangre azul?, ¿o toda la sangre es roja?”

Desde que la princesa Letizia irrumpió en la Casa Real, muchas de las críticas y ataques han venido por ahí. “Caricaturas, chismes, chistes, la casa real no debe querellarse?”, pregunta Urbano.

La Reina responde: “¡No!, hay que tener los nervios templados y, aunque te estén machacando, que la sangre no llegue al río. Los reyes no se defienden”.

-¿Cuesta?- pregunta Urbano

-“¡Pues claro!, ¡No somos de piedra! Hacerse el sordo cuesta. Todos tenemos nuestro amor propio. Pero hay que tragarse el sapo: recibir, saludar, sonreir, “¿qué tal?” como si nada. Peor sería que te sacaran de tu sitio... La crítica a las claras no molesta, se encaja y punto. Lo más desagradable es cuando el que critica tiene mala baba y se le notan las ganas de hacer daño ¡Buaj!.. y volvemos a los de siempre: libertad de expresión ¡sagrada libertad de expresión!... la Reina tiene menos libertad de expresión que tú...”

Por algún punto la periodista tuvo que comenzar a hacer sus preguntas y la primera fue: ¿Cómo se enteró del flechazo entre el príncipe Felipe y la periodista Letizia?

-Yo no fui la primera en saberlo, pero sí en adivinarlo. Era en verano. Estábamos en Palma, en Marivent, todavía sentados a la mesa terminando de comer. O ya en los postres. De pronto Felipe mira su reloj: “me voy a ver el telediario de las tres”. Así un día y otro... Yo ya mosqueada: “¿qué tendrá el telediario de las tres?”.Me voy a la sala y me siento a verlo con él. Esto varias veces. Las noticias de verano tampoco eran muy allá. Como te puedes imaginar, en el telediario cambiaba todo, todo el día. Todo menos ella. Y él hacía algunos comentarios: “tiene mucho estilo ¿verdad?”, “lo hace muy bien ¿no?”, “es guapa, eh, ¿no te parece?”. Luego organizaron algo, un encuentro una cena o no se qué en casa de Pedro Erquicia (un conocido periodista de Televisión Española). Eso a lo mejor lo sabes tú mejor que yo. Pero cuando nos lo dijo sinceramente a mi no me pilló en... en... en la higuera”.

-¿La transformación de Letizia Ortiz Rocasolano en princesa de Asturias ha sido obra de la Reina?

-“De Letizia, de ella misma”, responde la Reina segura, y enseguida no escatima en halagos: “Letizia es inteligente, alegre, viva, dinámica, divertida, sensitiva, atenta... Es fina y delicada, pero fuerte. Me asombra ver lo exigente que es consigo misma. Importantísimo: tiene un sentido innato del deber y del servicio. Ha entendido y ha captado como por ósmosis qué es ser princesa, qué es ser reina y cuál va a ser, ¡cuál es!, su misión: servicio, servicio y servicio. Se ha hecho cargo: servicio sea la hora que sea, con frío o con calor, apetezca o no apetezca”.

No deja de sorprender que una suegra hable tan bien de su nuera, reflexiona la periodista, pero la Reina todavía no ha terminado.

“No es que yo lo diga: está a la vista que es elegante, con un gusto exquisito, y siendo una mujer joven y moderna, tiene un instinto del saber estar que... ¡a muchos les puede dar mil vueltas!... Pero sobre todo –apunta la Reina respecto a la pareja- son felices. Y eso es esencial. ¡Se adoran. Siguen amartelados como si fueran novios. No les importa que los vean cogidos e la mano en el fútbol, en los toros... Letizia es muy femenina, muy cariñosa... Y muy honrada ¡Con todo lo que esa palabra significa! Yo estoy encantada, encantada, encantada”.

La reina niega que le haya dado a Letizia clases de algo, y por el contrario, dice que es ella quien le ha enseñado cosas. "Con Letizia veo la vida desde otra perspectiva. Me pongo al día en cosas que están ahí, pero que me resultan nuevas, y es buenísimo estar aprendiendo siempre tengas los años que tengas”.

La Reina, que este domingo cumple 70 años, habla con la periodista Pilar Urbano de otros temas. Y como mencionamos antes, su opinión sobre las parejas gay ha generado una gran polémica: “puedo comprender, aceptar y respetar que haya personas con otra tendencia sexual, pero ¿qué se sienten orgullosos por ser gays?, ¿qué se suban en carrozas y salgan en manifestaciones? Si todos los que no somos gays saliéramos en manifestación colapsaríamos el tráfico. Si esas personas quieren vivir juntas, vestirse de novios y casarse, pueden estar en su derecho, o no, según las leyes de su país: pero que a eso no lo llamen matrimonio, porque no lo es.

"Hay muchos nombres posibles: contrato social, contrato de unión”. Ante esta respuesta el partido político Izquierda Unida ha pedido a la reina que se reserve sus opiniones al respecto, y el Colectivo de Gays y Lesbianas ha pedido una rectificación a la Casa Real.

Respecto a las fotos de la familia real quemadas por un grupo de jóvenes catalanes dijo que “fue un disgusto para todos, pero son fotos, no nos queman a nosotros... queman fotos trozos de papel, así que ya se apagarán”.

La política internacional no se quedó de lado, y en referencia a Obama responde “me siento muy satisfecha por la posibilidad de que un negro pueda llegar tan alto... creo que es un hombre sincero, inteligente y eficaz”.

Respecto a Fidel Castro, la reina cuenta cómo en un encuentro con el líder cubano le dijo: ¿por qué no abres un poquito, un poquito?. Él contestó: “¡Nooo mi reina! No puedo, si abro un poquito enseguida querrán muchito”.