Amamos los planes de fin de semana y para darte una escapada práctica, pero muy bien hecha, tienes que considerar Puebla. En coche desde la CDMX en dos horas estás allá y hay mucho por comer y beber. Incluso para ver, pues la ciudad de Puebla tiene más de 2,600 monumentos catalogados por la UNESCO, convirtiéndola en el mayor patrimonio artístico colonial de toda América.
Encontramos un hotel que es una joyita arquitectónica de la ciudad, se trata de Palacio Julio Hotel en una construcción que data del siglo XVII. Aquí 5 razones para hospedarte allí en tu próxima visita a Puebla.
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Palacio Julio Hotel en Puebla
Es una joya arquitectónica
Para crear el Palacio Julio Hotel rescataron dos casas estilo palacio que datan del siglo XVII. Así que el huésped podrá adentrarse en el encanto del pasado de la vida de los poblanos en aquella época y vivir esa maravillosa huella que dejaron. Lo mejor es que respetaron el estilo arquitectónico barroco del palacio y podemos ver ese legado de época en todo el hotel. Es un sueño que conserva los cielorrasos originales completamente restaurados y pintados a mano en sus tres salones.
Tiene ubicación privilegiada
El centro histórico de Puebla se ha convertido en el lugar cool para salir a comer y cenar a lugares como Moyuelo. Así que mejor ubicación no podría tener el Palacio Julio. Justo en el centro, desde sus ventanas puedes ver los principales monumentos, súper cerca y con la mejor vista: La Catedral, Iglesia de la compañía, San Francisco, San Miguel, Santa Clara, San Pedro, Santo Domingo, que tiene una de las mejores capillas del mundo.
Una de las mejores vistas del centro histórico de Puebla se puede disfrutar desde la suite 5 de Mayo: la iglesia de San Pedro, San Francisco y San Cristóbal son un relevante marco del bello conjunto de pequeñas iglesias barrocas. Al fondo la Malinche y el cerro de Loreto.
Además a tres minutos caminando del Palacio Julio se encuentra El Barrio de Los Sapos con sus antigüedades y objetos curiosos, así como la biblioteca de Don Juan de Palafox catalogada como la mejor biblioteca de Latinoamérica.
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Las habitaciones en Palacio Julio
Todas las habitaciones y suites son súper luminosas por las ventanas altas propias de esta arquitectura. Así que tu cuarto se iluminará con luz natural. El suelo es de madera de tzalam, además de los toques de artesanías poblanas de alto nivel como las lámparas (estilo blandón) de diseño Tolzá recubiertas de plata, entre otras artesanías locales que decoran cada rincón del hotel.
Los restaurantes
Palacio Julio Hotel tiene dos restaurantes: Mon Amour Petite y Puebla Mon Amour. En el primero encontramos la cocina barroca de Puebla con el mejor mole poblano, pipián verde y chiles en nogada; sin olvidar los ricos chilaquiles estilo palacio con salsas artesanales tatemadas y epazote. Incluso el restaurante Mon Amour Petite conserva los elementos decorativos y ornamentales del siglo XIX.
Frisos con motivos imperiales, follaje y rostros en bajo relieve. Además de cielorrasos originales completamente restaurados y pintados a mano en sus tres salones: destacan los rostros y los motivos dorados que les confieren una imagen orgánica.
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Por su parte, en Puebla Mon Amour ofrecen una carta de la cocina poblana con influencia francesa y española donde priorizan el producto fresco y de la estación de la mejor calidad. De forma que el menú cambia con las temporadas.
Para hacer eventos
Puebla se ha convertido en un destino de bodas por sus venues e iglesias, y este hotel tiene grandes opciones para los eventos de esa fecha tan especial. Tiene salones increíbles que le dan un toque muy romántico al evento por su arquitectura, por ejemplo, el privado Mon Amour tiene motivos de follaje clásicos del Neoclásico en todo el perímetro del techo suelo y lambrin de madera natural le dan un toque de calidez. El Salón Vitral de Palacio Julio tiene un increíble vitral de cristal emplomado con motivos azules y amarillos de estilo Art Nouveau da nombre a este espacio de doce metros de altura y de claros elementos que corresponden al estilo neoclásico.