Entrevista con Marina de Tavira: “El teatro no se va nunca”
Marina de Tavira está de vuelta en el escenario con 'Consentimiento', un texto complejo sobre el abuso y la justicia. En esta conversación, habla del proceso y el valor de la pausa en su carrera.
Marina de Tavira, cumple temporada en el teatro Helénico de la Ciudad de México de la obra de teatro Consentimiento. (Total look Chanel, joyería Cartier).(Anylu Hinojosa-Peña.)
“Volver al teatro, ¿existe tal cosa? ¿El teatro se va o siempre está presente?” Es la primera pregunta de una conversación con Marina de Tavira, actriz mexicana nominada al Oscar, que regresa a las tablas con Consentimiento, un texto sobre temas complejos que, al abordarlos, no ofrece concesiones.
“El teatro no se va nunca, sigue en la mente, en el corazón pero sobre todo en las ganas de hacerlo”, responde Marina días antes de arrancar la temporada en el Teatro Helénico, de este montaje a partir del texto de la escritora británica Nina Raine.
Publicidad
Contrario a lo que muchas personas esperarían que le ocurriera a una nominada al Oscar, Marina se ha tomado con calma los proyectos en los que participa después del fenómeno de Roma. “En ese momento era muy difícil lidiar con tanta expectativa. Nos han enseñado en este sistema capitalista a ir por más, que todos deberíamos aspirar a lo mismo, pero todos tenemos diferentes formas del éxito”.
No sé si es el proyecto indicado pero es el que llegó. Quizá eso lo sabré cuando acabe la temporada.
Marina de Tavira retratada por Anylú Hinojosa-Peña en el restaurante Lazy Susan. (Vestido Dior, joyería Cartier).(Anylu Hinojosa-Peña)
La actriz que ha consolidado su trayectoria en el teatro, explica que estás pausas han respondido a vivir, poder hacer las cosas que una temporada teatral o un rodaje no le permite hacer. “Además eso alimenta mi trabajo”.
Ya han pasado tres años de su último proyecto teatral en vivo: Tragaluz, el cual cumplió temporada en Casa del Teatro justo antes de la pandemia y, aunque intentó continuar con la actividad escénica a través de El Paraíso de la inversión yBlindness,no es lo mismo, sentencia. “El teatro es un arte sobre la presencia física de quienes lo hacen y quienes lo miran”.
Ya quedó establecido que el teatro nunca se va, pero al escenario, este sí es un regreso. Consentimiento aborda el complejo tema de la violación y pone sobre la mesa el tema de la impartición de justicia y la posibilidad de otorgar el perdón y de mostrar genuino arrepentimiento a través de un grupo de abogados, una editora, una actriz en ciernes y la víctima de un abuso.
No lo toca desde buenos ni malos, explica Marina. “Nos pone delante un grupo de personas que pueden ser muy desagradables, pero que, si nos sentamos desde la superioridad moral de 'esas personas no somos nosotros, que horrendas son', pues algo de ellos vamos a ver en nosotros mismo y eso también es interesante”.
Publicidad
A primera vista el texto y el montaje parecen pertinentes dado el contexto social que vivimos. “Asusta hacer un texto así, cuando los discursos feministas, de la diversidad sexual, la inclusión racial y de clase están ardiendo. Nunca sabes desde qué lugar se va a entender. No es maniquea, es un espejo en el que a lo mejor no nos va gustar vernos. No nos va a dar la clase moral, nos va a decir que a veces podemos ser horribles”.
Marina de Tavira, actriz nominada al Oscar. make up por Tatiana Franco para Givenchy y peinado: Aby Uscanga. (Vestido Dior, joyería Cartier). (Anylu Hinojosa-Peña)
El proceso de ensayos es uno de los favoritos para Marina. Se despierta temprano, hace yoga y destina un buen tiempo a ver documentales o series que nutran el tema sobre el que está abordando. Los encuentros ocurren en su casa, en un espacio llamado el salón de ensayos, ahí las conversaciones con Juan Manuel Bernal, Jana Raluy, Alfonso de la Borbolla, Adriana Llabres, Daniela Scmith y Arturo Barba, “se ponen increíbles”.
“Es cierto que las compañías de teatro, se vuelven familia y esta es una familia preciosa. He trabajado con muchos de ellos y Enrique Singer ha sido mi director antes y fuimos socios en nuestra compañía. Se siente mucho un reencuentro”.
El cine tampoco se aleja tanto. Marina tiene dos proyectos muy en puerta. El primero de ellos es El aroma del pasto recién cortado, largometraje que filmó en Buenos Aires de la mano de la directora Celina Murga y de la que Martin Scorsese es el productor ejecutivo. El segundo es Latido, largometraje de Katina Medina Mora que se estrenará en la competencia oficial del Festival Internacional de Cine de Morelia.
Consentimiento se presenta de jueves a domingo en el teatro Helénico de la Ciudad de Mexico.
