Ana González Bello llega muy bien acompañada. Viene con dos perritas que adoptó, una durante la pandemia y la otra recientemente. Lo más probable, piensa, es que se quede con ellas. Esta entrevista se lleva a cabo en un parque de la calurosa primavera de la Ciudad de México. Horas después de la conversación se irá a comer para llegar al teatro y dar función de Siete veces adiós, el musical que protagoniza. Horas antes estuvo en un vuelo que la trajo de regreso de Tulum, donde graba una película. En esas carreras entre camerinos, paseos caninos y aeropuertos, la actriz mexicana vive el gran momento de su carrera.
Hace poco más de diez años, Ana tomó la decisión que dictó su presente. Estudiaba Relaciones Internacionales en Puebla, quería dedicarse a la diplomacia y ser comisionada de la ONU. Pero ver Chicas mal le dio una clave. En el filme de 2007, el personaje de Martha Higareda menciona que quiere irse a estudiar actuación a Londres y filmar una película con Gael García Bernal. Y entonces pensó “Y si me voy a Inglaterra para hacer una película con Gael”. Y así lo hizo.
Lo que empezó como un curso mientras estaba de intercambio de su carrera original, se transformó en una carrera decidida que arrancó en el teatro independiente mexicano. Hoy que protagoniza uno de los fenómenos teatrales de la escena mexicana reciente y se encuentra en medio de una filmación, no se arrepiente de ninguna de sus decisiones.