Rupi Kaur alza la voz en la 'Luna' mexicana y la hace vibrar
En el Lunario del Auditorio Nacional, con un banco de madera, un micrófono y una mega pantalla como sus herramientas escénicas, la poetisa derrochó su talento, ese que la lleva a conquistar a miles.
En el Lunario del Auditorio Nacional la emoción era casi palpable, mujeres y hombres, pero en su mayoría ellas, estaban expectantes por ver a Rupi Kaur, la poetisa que encontró en las modernas redes sociales el puente para comunicar su arte; las palabras que son capaces de resonar en el corazón de miles que no pierden la oportunidad para acercarse a su poderoso performance.
En la intimidad de la Luna mexicana, tal parecía que era una estrella pop la que aparecería, cada vez que una voz anunciaba que se acercaba el momento, las muestras de emoción se potenciaban. Y es que no es para menos, ya que una lectora como Liat, reveló a Quién, que conoció y aprendió a amar, "hace algunos años", la poesía gracias a la labor y expresión de Kaur.
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En la sala también estaba Daniela Rosas, quien agregó que la inspiración de Rupi resonó en ella: "Es un abracito al alma", definió la poesía de la nacida hace 30 años en Punjab, India. La joven agradeció que la obra de Kaur sea tan "contemporánea", que plantea temas complejos con una sencillez y calidez que atrapan e invitan a la reflexión, pero más aún que conectan.
La voces se extinguieron cuando llegó el momento de que Rupi se apoderara del escenario, a las 20:43 horas. Para arrancar, con todo en tinieblas, la voz de Beyoncé con Xo se adueñó del lugar. Los "alaridos" cuando llegó a escena Kaur fueron ensordecedores. Agradeció al público su presencia y aceptó que tenía ganas de llorar, debido a que la ayudaron a "cumplir sus sueños".
Rupi Kaur tiene un poderoso mensaje para compartir. (Emma McIntyre/Getty Images)
Sin el tradicional chasquido de dedos, sino con gritos y porras fueron las formas en las que Rupi quiso que su audiencia le expresara que la estaban pasando bien, incluso con golpes de zapatos. La promesa fue tocar temas nuevos, pero decidió comenzar por su salud mental. La búsqueda de su terapeuta ideal y la llegada de la depresión fue la primera parada en su divertido y profundo recital.
A los sobrevivientes en el silencio, a los solitarios que luchan contra la tristeza y a los valientes que se mueven para hacerle espacio a la alegría, con la visión de que se puede uno sentir vivo otra vez, les dedicó su arranque. Cambió el tema a "otro igual de extenuante: los hombres", a quienes les dio el mensaje de que deben admirar lo brillante que es una mujer e impulsarla a que lo sea aún más.
Rupi Kaur acaba de llegar al 'tercer piso'.(Jeremy Chan/Getty Images)
A petición de alguien del público leyó un poema de amor, "porque amamos el amor", expresó a beneplácito de todos. Eligió luego Autumn, que escribió para alguien que no lo merecía, pero que en su voz, a pesar de la historia detrás, simplemente cautivó. Siguió con La mentira que vivo, uno de sus favoritos porque se siente en un video de Destiny's Child cada que lo recita.
"Son maravillosos", no paraba de decirle a las personas que fueron a la cita. Decidió entonces hablar de aquellos que viven la migración, "la gente y las historias por las que quiero luchar", por aquellos que están divididos entre dos mundos y que resumió en Boat, que se inspiró en Alan Kurdi, quien murió en una playa turca en busca de una vida mejor, en plena crisis de refugiados.
Rupi Kaur ofreció sus poemas favoritos en México. (Alberto E. Rodriguez/Getty Images)
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Broken English fue el siguiente; una carta de amor a los migrantes en todos lados y a su propia familia que quiso ir más allá; a la grandeza de las raíces que son tan infinitas y a las que no se les puede poner un punto final. Para dar un respiro compartió acerca de su "comunicación pasiva agresiva" para hacerle saber a sus amigos que los extraña, y lo plasmó en Friendship Nostalgia.
The Art of Growing, de su segundo libro, fue una poema que quiso brindarle a su audiencia en México, por la energía que le regalaron. Muy necesario en una tierra como la nuestra, en la que es un must decirle a muchos que el cuerpo femenino no es una mercancía. De nuestro país alabó el lenguaje, la comida y aceptó sus ganas de aprender aquí español.
Rupi Kaur logra convocar a miles con su poesía. (John Sciulli/Getty Images for Rupi Kaur)
Uno de los momentos más poderosos fue cuando invitó a Fer de entre el público para juntas alzar su voz. Pero quiso también que Andrea compartiera con ella, mientras Kapur leyó en inglés, su invitada lo hizo en español, acerca de su disculpa a todas las mujeres a las que llamó guapas, antes de decirles que son inteligentes, fuertes y extraordinarias.
Para empezar a despedirse eligió una de sus creaciones favoritas, en la que dejó en claro que la fiesta de la vida apenas comienza a los 50, el resto son ensayos. Antes del adiós agradeció que pudo mostrar que la gente quiere sentir, vivir, leer y escuchar poesía. "Espero que encuentren la felicidad plena", les deseó, y para redondear la idea les dedicó Laugh Lines.
Con sus poemas, Rupi Kaur ha llegado al corazón del mundo. (Jeremy Chan/Getty Images)
Sobreviviente, alguien que se sintió sola, pero que supo que al final la riqueza más grande está en conectar, es así como se definió Rupi y dijo estar segura de que quienes la leen son iguales; todas ellas y ellos, que hoy le aplaudieron, la sintieron como nunca y le agradecieron ser aquella que transmuta en fuego o en agua para ser simplemente la mujer que no muere jamás.
