"Estábamos deseando celebrar nuestro primer Festival de Cine de Sundance completamente híbrido y nuestros equipos han pasado un año planeando un festival como ningún otro", lamentó la organización del evento en un comunicado.
Sin embargo, agregó, "pese a los protocolos más ambiciosos, la variante Ómicron con sus inesperadas altas tasas de contagio está empujando los límites de la seguridad sanitaria, viajes y otras infraestructuras en el país".
En ese sentido, el festival explicó que no veía viable que miles de artistas, miembros del público, trabajadores y voluntarios se dieran cita en este evento a lo largo de 11 días, al tiempo que las autoridades locales tienen problemas para ofrecer los servicios más esenciales.
"Fue una decisión difícil de adoptar —siguieron— como organización sin fines de lucro, el espíritu de Sundance es hacer que algo funcione aunque sea contra los elementos, pero se espera que el número de casos aumente en nuestra comunidad anfitriona la semana del festival".