Cinco años en la escritura de un guión, cuatro semanas de rodaje, actores, no actores y complicaciones de comercialización son algunas de las pruebas que ha superado el cineasta mexicano Isaac Cherem para lograr que Leona,su ópera prima, llegue a las salas comerciales este 17 de diciembre.
Graduado de Los Angeles Film School en 2011, Isaac es co-fundador de la productora Fosforescente, desde donde se gestaron sus dos cortometrajes como director Family First (2011) y Mute (2012) y produjo las cintas El incidente (2014), de Isaac Ezban y Dos veces tú(2017), de Salomón Askenazi.
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Hablemos de Leona Su debut como director de largo formato sucedió en 2018 en el Festival Internacional de Cine de Morelia cuando estrenó Leona, una película que ha sufrido altibajos. En Morelia obtuvo el galardón a mejor actuación por el trabajo de su protagonista, Naian González Norvind, quien también participó como co-guionista. Después, la cinta fue invitada a inaugurar el Fesival de Cine Judío en México de 2019 pero, al considerarla arriesgada, el comité organizador se retractó después de ver el filme por temor a la reacción de los patrocinadores.
El director se planta desde un punto crítico hacía sus orígenes. “Me sigo sintiendo identificado pero ya no me siento parte de la comunidad integralmente, porque la comunidad me ha presentado expectativas y moral con la cual no estoy de acuerdo. Estoy más interesado en explorar mi propia curiosidad.”
La película ha sido exhibida en Festivales de Cine Judío en diferentes partes del mundo como Philadelphia, Atlanta, Gran Bretañan, por mencionar algunos, así como en el Festival Internacional de Málaga, en España y en el Festival Internacional de Cine de Lima, en Perú.
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Cuando la realidad supera el guión
El guión fue escrito entre Cherem y Naian, la actriz protagónica. Ella ayudó en la construcción del personaje protagónico y en los diálogos, lo que resultó en la naturalidad de los personajes de esta cinta, dijo en entrevista. Por otro lado, Cherem cuenta que lo más complejo del rodaje fue el trabajo con los no actores, ya que por presupuesto la película se filmó en tan solo cuatro semanas, así que optó por utilizar a personas que pertenecen fuera de la ficción a la comunidad judía de México para interpretar algunos de los personajes.
En 95 minutos, Cherem nos presenta a Ariela, una joven judía que parece no encajar del todo. Es constantemente presionada a cumplir con las expectativas que se tienen de las mujeres. Ella decide tomar su propio camino y se topa con que amigos y familia le dan la espalda al no seguir las costumbres de su comunidad. El director cuenta que esta situación fue algo que vivió en carne propia, al ver como su hermana se enfrentaba a un camino más rocoso en comparación con él. “De ella esperaban que fuera más obediente y afortunadamente no lo fue.”
“A dos años de la primera proyección de Leona sigo creyendo que, en el entorno del que vengo yo y en general en este país, hay una expectativa en las mujeres de mayor obediencia. Los hombres tienen mayor libertad y las mujeres son oprimidas por el sistema”, finalizó.