Todos la recordarán por su participación en el reality show Made in Mexico (Netflix 2018), pero la vida familiar de Hanna Jaff es mucho más que un programa, de hecho parece sacada de una novela.
Ella es la mexicana que será parte de la aristocracia inglesa
Nació en San Diego el 4 de noviembre de 1986 y es descendiente directa de Pasha´s y Visir´s del Imperio Otomano y Persa, miembro de la dinastía Jaff Tribe.
El Castillo de Sherwana es su hogar ancestral y los Jaff son propietarios del North Bank Iraq, el banco privado más grande de aquel país.
Los temas de ayuda social siempre han sido su gran pasión, por ello creó Fundación Jaff por la Educación, con la que ha ayudado a más de 120,000 personas, migrantes y refugiados a aprender inglés, así como brindarles educación para que tengan mejores oportunidades.
En México su fundación tiene presencia en 18 estados aunque también brinda apoyo en los campamentos de refugiados en Iraq, donde ella misma ha dado clases de inglés.
Esta joven de sólo 33 años enamorada de los temas filántropos y con currículum impresionante ahora vuelve a ser noticia por su compromiso con Henry Roper-Curzon de 34 años, descendiente de Henry VII Tudor, rey de Inglaterra y señor de Irlanda y de la reina María Stuart de Escocia. Él es hijo de Lord Teynham, David Roper-Curzon, quien a su vez es primo de Sarah Ferguson, madre de las princesa Beatriz y Eugenia de York, primas de Henry.
El príncipe azul hace su aparición
Hace tres años, Hanna Jaff iba y venía de Tijuana, México, a Londres, donde pasaba largas temporadas, pero hace un año todo cambió y el corazón hizo que de manera definitiva se instalara en el Reino Unido.
Su historia de amor con Henry Roper-Curzon, heredero al título de Barón Teynham en el condado de Kent, comenzó de la manera más inesperada. Un día mientras Henry paseaba a su perro Alfie (su adoración) acompañado por su amiga Martha Sitweel, éste le comentó que le gustaban las mujeres latinas, pero que quería a una mujer inteligente y buena que tuvieran gustos en común. Los dos jóvenes se encontraron con otra amiga, Keira Twonsend, que también paseaba a su perro y Martha le preguntó de manera espontánea: “¿De casualidad conoces a una latina para mi amigo Henry?”, a lo que Keira le contestó “¡Sí! Tengo una amiga mexicana que se llama Hanna”, mostrándole su foto en Instagram.
Henry sonrió y le pidió a Keira que los presentara, fue entonces que ella organizó una cita a ciegas en una galería dos semanas después ya que Hanna se encontraba de viaje.
Ese día en la noche el avión de Hanna se retrasó dos horas, aunque pensaron que Hanna no llegaría él la esperó. Cuando Hanna al fin hizo su aparición, al primero que vio de lejos fue a Henry, ambos se sonrieron. Jaff buscó a Keira, la saludó y se quedaron observando un cuadro cuando en eso interrumpió Henry con un“Es hermosa ¿verdad?”.
Desde entonces no se han separado pero lo más sorprendente es que Henry a tan sólo cuatro meses de haberla conocido decidió proponerle matrimonio durante un viaje a los Alpes suizos.
Uno de esos días cuando su grupo de amigos y la pareja se disponían a esquiar, Hanna se arrepintió ya que para su gusto, las montañas en Gstaad son muy empinadas. Todo el grupo trataba de convencerla y aunque ella accedió estaba muy incómoda, quejándose todo el camino.
En el momento en que Herny encontró el lugar perfecto se arrodilló para decirle “Eres lo que siempre esperé, te amo desde el primer momento que te vi. ¿Te quieres casar conmigo?”, ella sólo atinó a decir “perdón, perdón, perdón por quejarme tanto de la montaña, sí, sí, sí, claro que me quiero casar contigo”.
Una boda aristócrata con sabor a Mariachi y en México
Los preparativos ya están en marcha para la boda de Hanna y Harry, como ella lo llama de cariño. La boda religiosa será en México en el mes de julio, muy cerca de la ciudad, durará tres días y por supuesto no faltarán los mariachis, la comida mexicana y todo el folklore de nuestro país. A ella asistirán 400 personas, entre amigos y familiares cercanos a la pareja. Tomando en cuenta los orígenes de ambas familias, sí se puede considerar una boda chica pues los novios sólo quieren estar rodeados por sus amigos y familiares más cercanos.
La boda civil será en Inglaterra en junio, también durará tres días, primero se llevarán a cabo varios eventos en la residencia oficial de la familia de Henry, Pylewell Park, construida en el siglo XII aunque desde 1879 es la residencia oficial de los Roper-Curzon.
La ceremonia civil será en el impresionante Palacio de Westminster también conocido como The Houses of Parliament, la mayor parte de su estructura corresponde al siglo XIX tras sufrir un importante incendio en 1834. Fue residencia real aunque desde el siglo XVI ningún monarca ha vivido ahí. En 1987 fue declarado por la Unesco, uno de los cuatro lugares Patrimonio de la Humanidad en Londres.
Hanna y Henry no podían haber elegido un escenario más imponente y romántico que este palacio de estilo neogótico ya que su excepcional ubicación junto al río Támesis le brinda un panorama de película.
No cabe duda que ésta será una de las bodas más esperadas en México y en el Reino Unido este 2020, además, su lista de invitados donde no faltará la aristocracia inglesa, se presume nutrida. Nadie se la quiere perder.