Victoria Beckham rompe otra vez el protocolo, ahora en España
Victoria Beckham es capaz de robar miradas incluso en eventos en los que el protagonismo está reservado para alguien más. En Sevilla se llevó a cabo la considerada boda del año española, entre la presentadora de televisión Pilar Rubio y el futbolista del Real Madrid, Sergio Ramos, pero quien acaparó los reflectores fue la ex Spice Girls.
La diseñadora se pasó por alto, otra vez —como en la boda de Meghan y Harry—, la tradición de no opacar a la novia. Beckham decidió acudir a la catedral sevillana con un vestido blanco roto, estampado cadena, manga larga y cuello alto (a pesar de los 30 grados de temperatura); para complementar el look decantó por unos stilettos fucsia, que ha utilizado en más de una ocasión.
De la mano de su esposo, el exfutbolista David Beckham —con su chaqué azul plumbago—, Victoria caminó hasta el templo religioso con su altiva actitud, como para refrendar el comentario que realizó alguna vez de la ciudad ibérica: “¡Huele a ajo!”. Pero el rostro le cambió después de la ceremonia e incluso subió a su Instagram una foto para recordar por siempre el momento.
El diseño que portó Posh Spice pertenece a su colección otoño/invierno 2019-2020 y ya había sido visto en otra ocasión, pero en el ámbito royal. Meghan Markle lo utilizó hace un mes, aún embarazada de Archie Harrison. La Duquesa de Sussex le dio el toque de realeza al utilizar un abrigo blanco y un tocado pillbox.