Nirvana Hank es una de esas jóvenes que utiliza el poder de las plataformas digitales para dar voz a aquellos temas que podrían considerarse tabúes. Desde su experiencia al estar anexada en una clínica de rehabilitación hasta consejos sobre cómo llevar la sobriedad en situaciones que podrían parecer incómodas.
Ella es Nirvana, la hija menor de Jorge Hank Rhon
Recientemente se viralizó un video en el que la joven, como parte de un trend, muestra las particularidades de su estilo de vida como hija de uno de los empresarios más poderosos del país.
“Soy Nirvana Hank, claro que no tengo jirafas en el patio de mi casa. Soy Nirvana Hank, a mi familia no le gusta nada el rojo y el negro. Soy Nirvana Hank, en el comedor de mi familia apenas y me caben mis hermanos. Soy Nirvana Hank, claro que no tenemos una isla de changuitos. Soy Nirvana Hank, claro que no le voy a los Cholos. Soy Nirvana Hank, claro que nunca he ido a un casino”.
Y, para todo esto, ¿Quién es Nirvana Hank?
Es hija de Jorge Hank y María Elvia Amaya, cuando contrajeron matrimonio ella ya tenía seis hijos: Alejandro, Mara, Ana Guadalupe, Carlos Andrés, José Mario y Rodrigo, quienes hoy llevan también el apellido Hank. María Elvia y el político se casaron en 1996 y tuvieron tres hijos (María Guadalupe, Nirvana y Jorge Carlos Hank Amaya). Su matrimonio duró hasta la muerte de la filántropa y ex directora del DIF Tijuana ocurrida en septiembre de 2012 después de dos años de batalla contra el cáncer.
Su padre, Jorge Hank Rhon tiene un largo historial amoroso, del que han surgido casi dos docenas de hijos con por lo menos seis mujeres. El empresario, político y dueño de Grupo Caliente, una de las empresas de apuestas más grandes del país, se ha casado en cuatro diferentes ocasiones y tiene dos hijos nacidos fuera del matrimonio (que también están registrados con su apellido).
Las batallas de Nirvana Hank
Nirvana forma parte de una familia numerosa y en abril del 2023 en una entrevista para Quién reveló su historia, misma que hasta finales de agosto de hace dos años solamente su familia conocía. Llevaba una vida llena de privilegios y aunque quizás desde fuera parecía que todo era perfecto, la realidad es que Nir estaba peleando fuertes batallas internas: era alcohólica y se enfrentaba con pensamientos suicidas e incluso con autolesiones o cutting. La tarde del 25 de mayo de 2020, en plena pandemia, despertó entre botellas vacías y una sensación de haber tocado fondo que la llevó a pedirle ayuda a su padre, Jorge Hank Rhon, con quien no hablaba hacía cuatro años. “Cuando me fui al anexo, genuinamente pensé que nadie se iba a dar cuenta de que me había ido. Estuve cinco meses en aislamiento y un año y medio en una casa de medio camino, que es un lugar de tránsito antes de retomar una vida normal”, platicó en una entrevista para Quién.
La sanación de Nirvana
Hoy, después de mucho trabajo personal y con la ayuda de expertos, Nirvana se siente orgullosa de contar su historia. A la par, la equitación se ha vuelto como una terapia. Le interesa aprender sobre negocios, está escribiendo un libro, disfruta tomar cursos y diplomados de administración de empresas, psicología de adicción y recuperación, alentada por los comentarios positivos de sus seguidores a través de las redes sociales. “He encontrado mucho amor en todos ellos. La gran mayoría de lo que me escriben es positivo, pero sé que también hay gente que necesita sacar algo de maldad, así que prefiero que sea conmigo que con alguien vulnerable”.