Luego de un año de haber establecido el restaurante Malaak, Sabores de Líbano, los hermanos Nadina y Julio Nabil Naime se reunieron con el embajador de Líbano en México Sami Nmeir y su familia para celebrar en grande la fundación de Grupo-BO y el primer aniversario de este sitio que se ha convertido en un referente de la gastronomía libanesa en nuestro país.
Nadina y Julio Nabil Naime celebran un año de Malaak, Sabores de Líbano
La cita fue en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, lugar que durante la pandemia se convirtió en el refugio de la familia Naime y que, con el tiempo, los inspiró para emprender con un nuevo proyecto que resonará con sus valores y diera sentido a sus raíces y amor por la gastronomía libanesa.
Esta idea resonó en Nabila, la matriarca de esta familia, quien a esta inspiración sumó el ejemplo de su difunto marido Jalil Naime, quien fuera socio fundador del Centro Libanés y un gran promotor y participante de las actividades sociales, culturales, deportivas y gastronómicas de la comunidad de descendencia libanesa en México.
Al proyecto se fue sumando mucha gente que le gustaba la idea y así se dio forma a Grupo-BO que posteriormente diera paso a Malaak, Sabores de Líbano que hoy en día es uno de los referentes de comida libanesa tradicional más reconocidos en México. “Es un espacio que busca promover nuestras raíces, valores, tradiciones, costumbres y cultura a través de la historia de cada platillo, cada rincón y cada gesto”, comparten los fundadores.
Así fue el festejo junto al embajador
La visita de Sami Nmeir a Chiapas, además del festejo de Malaak, Sabores de Líbano, sirvió para mostrar al embajador la cultura, tradiciones, riqueza natural y sabores de San Cristóbal de Las Casas y sus alrededores.
Acompañado por su familia, Nmeir llegó para disfrutar de una cena de bienvenida que se realizó en el Hotel bö, donde pudo conocer la propuesta gastronómica del chef Hugo Olivera, quien ha apostado por una cocina mexicana contemporánea. Así mismo esta cena fue acompañada por tradicional música de marimba, bailables de Chiapas y Parachicos.
El sábado por la tarde, Casa Dugelay fue la sede elegida para una conferencia que dio el propio embajador sobre Líbano, su historia, la migración, tradiciones y gastronomía y luego de este encuentro, fue momento de celebrar en grande al restaurante Malaak, Sabores de Líbano, que recibió al embajador, su familia y un exclusivo grupo de invitados para una deliciosa cena con los platillos icónicos del lugar y, claramente, de Libano.