¡Es el consentido! Arturo Elías Ayub se ha ganado a pulso el cariño de los Slim

Durante este evento que reunió a figuras nacionales e internacionales para hablar sobre liderazgo, creatividad y negocios, Arturo Elias Ayub también Tuvo una presentación en el escenario del Auditorio Nacional. No se limitó a ser el encargado de la clausura, ya que moderó la conversación entre los más de 10 mil asistentes y su suegro, el hombre más rico de México.

Fue justo cuando Carlos Slim Helu respondía una de las preguntas que Arturo se distrajo por unos segundos y recibió un regaño del papá de su guapa esposa. “Luego lees, ¿no?, es que me distraes”, dijo el ingeniero cuando Arturo empezó a revisar unas hojas que le acababan de pasar.

La inteligente respuesta de Elias Ayub fue que si el estaba un poco distraído, había 10 mil personas que si le prestaban total atención a la respuesta que estaba dando y el empresario respondió que el encargado de hacer la pregunta había sido él, por lo que debía estar atento.

Este hecho lleno de naturalidad hizo que el auditorio explotara en risas y aplausos. Y es que esa es una de las razones por las que disfrutamos los actos públicos de Arturo, quien, sin duda, es el integrante más mediático de toda la familia y no tiene empacho en compartir su vida a través de redes sociales y también en distintas entrevistas que ha dado a lo largo de su carrera.

Pero, ¿Quién es Arturo Elías Ayub? Se trata de uno de los hijos de Alfredo Elías Aiza y Sylvia Ayub. Uno de sus hermanos, Alfredo, fue director general de la Comisión Federal de Electricidad y en general forma parte de una familia de origen libanés acaudalada.

Desde muy joven entabló relación con la familia Slim y en diversas pláticas ha relucido que entre sus mejores amigos se encontraba Carlos Slim Domit, a quien conoce desde los trece años.

La amistad con el primogénito del ingeniero provocó que años más tarde se convirtiera en miembro de la familia, ya que gracias a las recurrentes llamadas que hacía Arturo a casa de los Slim conoció a Johanna, la guapa hermana de su “compadre”.

“Era la hermanita de mi cuate (…) esas pláticas se empezaron a volver más largas, más interesantes y más intensas y se empezó a volver otra cosa muy padre”, confesó el empresario en una entrevista que dió a la periodista Elisa Zurutuza.

Fue así como se enamoraron y en 1995 unieron sus vidas en un matrimonio sólido del que han nacido tres hijos, Arturo, Johanna y Alejandro Elías Slim, pero ser parte de la familia más acaudalada también ha representado un reto para este exitoso empresario y en esta misma plática resaltó que existía una regla no escrita que impedía involucrarse con las hermanas de sus amigos. “Me costó más trabajo decirle a Carlos que quería salir con su hermana, que a mi suegro, fue muy difícil y fue bronca”, recordó.

Así mismo confesó que Carlos fue su cuate de reventón y él que conocía todo de su vida, “pero también conoce lo bueno, y eso ayudó”. Fiestero, borracho, peleonero, jugador, mujeriego, fueron algunas de las palabras con las que él mismo describió su vida pasada durante esta entrevista, pero también fue enfático en decir que es un hombre al que le gusta la gente, lo que sin duda le ha abierto muchas puertas.

Tiene un indudable don para conectar con cualquier persona y su carisma lo ha convertido en uno de los empresarios más queridos y respetados de la actualidad, pero no todo son las relaciones humanas, ya que es un gran estratega egresado de la carrera de Administración de Empresas por la Anáhuac y con un posgrado en Alta Dirección de Empresas por el IPADE.

Estos títulos lo han colocado en importantes puestos dentro de las empresas del consorcio familiar, pero también por su parte es un emprendedor nato y en muchas pláticas ha comentado que su primer trabajo fue en la empresa de sus padres.

Con el tiempo él fue montando sus propias firmas y desde la llegada de Shark Tank –el reality show de emprendedores más importante del mundo– a nuestro país, Arturo se ha asociado con una larga lista de empresas hasta que en la más reciente temporada se bajó del entretenido proyecto para dedicarse a otras cosas igual de importantes.