Juan Domingo Beckmann, director general de José Cuervo, fue el anfitrión de una espectacular cena en los jardines de Casa Perfect, una exclusiva galería de arte en la parte más alta de Beverly Hills, lugar al que llegaron invitados especiales de México y de Estados Unidos para conocer la primera de tres ediciones especiales de Maestro Doble 50 Cristalino .
Juan Domingo Beckman presenta Maestro Dobel 50 Cristalino Onora
La develación de esta edición especial se realizó en Beverly Hills y corrió a cargo de María Eladia Hagerman y Maggie Galton, creadoras de Casa Onora.
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Entre música tradicional mexicana, María Eladia Hagerman y Maggie Galton, fundadoras de Casa Onora, recibieron en este lugar que antes fue casa de Elvis Presley a invitados como Ramón Chedraui, Patricio Garay y María Pallarés, quienes disfrutaron de un menú de tres tiempos, acompañados con cocteles de tequila y frutas tropicales.
Antes de la cena, Juan Domingo mencionó que “hace algunos años recibí un regalo especial de Navidad. Eran unos pequeños vasos de barro negro de Oxaca que me encanaron, así que le pregunté a mi esposa de dónde eran y ella me dijo que de Casa Onora, fundada por Maggie y María Eladia. Desde entonces supe que debíamos colaborar con ellas y hacer algo con Dobel 50”.
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Continuó explicando que la idea de colaborar con los artesanos de Onora, una de las marcas de diseño artesanal más importante del país, tomó forma durante la pandemia. “Pensamos en algo especial con la tapa de la botella, con el fin de apoyar y promover el talento de estos artistas increíbles que quizá no tienen tanta exposición en el extranjero e incluso en México”.
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El trabajo que inició hace año y medio, hoy se materializa en una edición limitada de Dobel 50 Cristalino, cuyas tapas especiales fueron elaboradas a mano por el maestro artesano guerrerense Pablo Pérez Martínez, basado en los colores de la marca, negro y plata. Esta edición limitada será distribuida en México y Estados Unidos, y será la primera de las tres colaboraciones entre la tequilera y Casa Onora, la cual se enfoca en trabajar y enaltecer el talento de una extensa red de artesanos nacionales y su legado cultural en textiles, bordados, grabados y cerámicas.
La decoración del evento incluyó una variedad de flores mexicanas como dalias, la flor nacional, además de girasoles y aves de paraíso, que adornaron las mesas durante el coctel y la cena, que incluyó un primer tiempo de sopa de tortilla, acompañada por caballitos directos de Dobel 50.
En el segundo tiempo se sirvió cerdo desmenuzado sobre una ensalada de cítricos con tuna, jícama con chips de plátano. El drink fue una tequila con jengibre orgánico, miel y limón deshidratado. El postre fue un ganache de chocolate con tarta de dulce de leche, acompañado por un tequila con chocolate oaxaqueño, cardamomo, canela y esencia de naranja.
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