El trabajo creativo en México ha sido muy bien valorado en los últimos años y hay emprendedoras que trabajan por sobresalir con negocios involucrados en el arte y la moda. Tal es el caso de Sarah Goodwin, Daniela Siller, Paulina Gil, Adriana Méndez y Regina Salas, quienes tienen en común un espectacular showroom en la colonia Roma.
Amigas y socias. Ellas son las creadoras de Colectivo Nuevo León
El espacio abrió sus puertas hace algunos meses. Paulina y Adriana fueron las primeras en llegar ya que planeaban ocupar esta casona marcada con el número 62 de la Avenida Nuevo León para volver a la vida Artífice Gallery, su proyecto que nació hace casi seis años pero que durante la pandemia desapareció de manera física.
La idea de crear esta galería fue, desde siempre “acercar el arte a más coleccionistas, crear una forma más accesible para empezar a coleccionar y al mismo tiempo promover a artistas emergentes mexicanos”, plática Adriana en entrevista.
“Adri y yo encontramos este espacio frente al Plaza Condesa, pero el lugar era muy Grande para sólo tener Artífice”, recuerda Paulina, sin embargo Regina Salas, fundadora de la marca de ropa Simona, también buscaba un espacio para mostrar sus creaciones y al haber convivido antes en otros showrooms, les pareció una buena opción compartir piso.
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Si bien los giros de ambos negocios son muy diferentes, el coolness de ambos los hacía perfectos para convivir en Colectivo Nuevo León, ya que Simona es una marca sin afán de pretensiones, sino con la intención de generar moda sustentable y responsable alejada del fast fashion.
“Simona es una marca de ropa que busca ofrecer básicos que duren. Hacemos ropa más consciente y que dure más de una temporada, no hacemos moda, sino ropa con materiales de muy buena calidad”, menciona Regina.
Pero aun quedaban espacios por llenar en esta edificación, pero no podía llegar cualquiera, y Paulina comenta que “buscamos que fueran mujeres emprendedoras con propuestas creativas, frescas y originales, ya que la idea es que si tú vienes a ver alguna de las marcas, las otras marcas te inspiren y te llamen la atención”, lo que generaría una experiencia global.
Así fue como llegó Daniela Siller ocupó otra de las áreas con su empresa Frameroom, la cual ofrece impresiones de excelente calidad y enmarcados de madera y acrílico ideales para preservar obras de arte.
La cuarta marca que se unió al proyecto fue Tea & Tequila. Fundada por dos inglesas, esta firma de ropa, bolsas y accesorios llegó para completar Colectivo Nuevo León con sus propuestas producidas en nuestro país bajo la premisa de estar en contra del fast fashion. “Nos importa utilizar materiales sostenibles, con telas naturales y trabajo de artesanos de diferentes partes de México”, complementa Sarah Goodwin, una de las socias de la casa.
Ya consolidado como un hotspot de diseño y arte en la Ciudad de México, este colectivo también tiene la intensión de iniciar con más proyectos en conjunto y aunque es casi evidente que Frameroom y Artífice ya colaboran con trabajo, las marcas de moda no cierran las puertas para posibles colaboraciones que vayan más allá de sólo compartir espacio.
“Incluso podríamos buscar que uno de los artistas de Artífice intervenga algunas de las piezas de Simona o de Tea & Tequila”, comenta Regina, lo cual daría un valor agregado a cualquiera de las marcas.