A penas el 3 de julio se dio a conocer que Enrique Ponce y Paloma Cuevas, quienes formaban una de las parejas más estables y mediáticas del jet-set español, se separaban después de 24 años de matrimonio.
Aunque la ruptura estuvo rodeada de rumores, según el círculo cercano a Paloma y Enrique, estos decidieron terminar porque la relación se desgastó.
Sin embargo, ahora ha surgido un detalle que dio un giro total a esta historia: una foto, o mejor dicho, una selfie del torero con otra mujer que por supuesto no es su esposa.
El programa ibérico Sálvame el que dio a conocer la imagen del torero con la joven Ana Soria, foto que ya causó gran revuelo en España, pues con ella se echa por tierra la versión de que Enrique y Paloma se separaron porque se les acabó el amor y confirma así el rumor de que sí hubo una tercera persona involucrada en su ruptura.
En la selfie en cuestión se ve al torero y a la estudiante juntos en la terraza de un restaurante o un bar, ambos sonrientes y en una actitud relajada. Según la prensa española, la foto se tomó en Mojácar (Andalucía) el pasado fin de semana.
Es una joven andaluza de 22 años que estudia Derecho en Granada con la que, según los rumores, el torero tiene ya un año y medio de relación, justo la época en la que el matrimonio de Enrique y Paloma se empezó a desmoronar.
Sin embargo, medios como el periódico El Español aseguran que esta versión no es precisa. De acuerdo con este medio, Ana y Enrique efectivamente se conocen desde 2018, gracias a que la familia de ella es gran aficionada a las corridas de toros; de hecho, se dice que los Soria son admiradores de Enrique a tal nivel que hasta lo han invitado a la casa familiar en algunas ocasiones.
El diario también menciona que fue Ana quien empezó a seguir la trayectoria de Enrique a través de las redes sociales y así fue como tuvieron su primer contacto. Luego fue cada vez más frecuente que intercambiaran mensajes privados hasta que empezaron a frecuentarse con la idea de "conocerse mejor con la bendición de los padres de ella".
"Se conocieron, se cayeron muy bien y hasta hoy. (Los Soria) son personas muy discretas y conocidas en Almería. No les gusta el escándalo ni verse en estas cosas, pero lógicamente están felices y encantados y conocen a Enrique", aseguró una fuente a El Español.
