Elena Reygadas

Mi amistad con Elena empezó cuando las dos estábamos sirviendo para una inauguración en la galería Kurimanzutto. Elena sirvió la cena y yo el tequila; hizo un maridaje con Tequila Casa Dragones Joven y ostiones kumai en escabeche, una receta inspirada en su abuela que me transportó a una experiencia de sabor exquisita, la misma que siempre encuentro en su cocina, ya sea en Rosetta, Lardo, en sus panaderías o en cualquier lugar del mundo donde ella esté cocinando. Es que busca distanciarse de lo predecible. Exploradora tanto de productos atípicos como también de productos mexicanos, con propuestas atrevidas y rigurosas que demuestran su libertad de pensamiento, su curiosidad y su imaginación. Yo no solamente admiro a Elena como chef, sino que también creo que es un ejemplo de la mujer mexicana moderna, visionaria, líder, mujer de negocios exitosa, mamá y excelente amiga. Es una líder gentil, elegante y discreta por fuera pero por dentro es una guerrera generosa y curiosa que hace de ella una amiga única y un ejemplo a seguir.